Magín: régimen tributario de RD está desvirtuado

El director general de Impuestos Internos, Magín Díaz, aseguró ayer que el régimen tributario del país está completamente desvirtuado y dijo que sus “atributos”, son en general lo opuesto a lo que deberían ser.

El director general de Impuestos Internos, Magín Díaz, aseguró ayer que el régimen tributario del país está completamente desvirtuado y dijo que sus “atributos”, son en general lo opuesto a lo que deberían ser.“Las bases de los principales impuestos están completamente erosionadas, al extremo de que la productividad del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios es una de las más bajas del mundo. Sólo el 14% de los trabajadores formales paga el Impuesto sobre la Renta; el Impuesto a la Propiedad solo recauda el 0.60% del Producto Interno Bruto y en Impuestos Selectivos a los Combustibles las exenciones representan el 60% de la recaudación”, planteó Díaz, al exponer en el Almuerzo Mensual de la Cámara Americana de Comercio (AMCHAMDR).

El director de Impuestos no se anduvo con rodeos, en una actividad repleta, especialmente de empresarios, en uno de los salones del Hotel El Embajador. Pero después de todo, aunque mantuvo un discurso fuerte, consiguió varios aplausos. “Una buena parte de las empresas que ganan dinero no pagan Impuesto sobre la Renta, gracias a las exenciones que han conseguido”, dijo el funcionario en una parte de su discurso. Y agregó: “En realidad la República Dominicana se ha convertido en el secreto fiscal mejor guardado de toda la región. Con un poco de creatividad y una pizca de viveza, muchas empresas sacan provecho al amplio menú de exenciones que nuestro país ofrece”. De acuerdo con las expresiones de Magín Díaz, la tasa tributaria es una de las más bajas de la región y “el problema se agiganta cuanto se tiene en cuenta que un número creciente de empresas se acogen al más amplio, bondadoso y diverso esquema de exenciones tributarias de casi todo el continente. Con el discurso que pronunció, el director de Impuestos Internos, de alguna manera tocó cuestiones muy puntuales sobre la mayoría de los sectores que estuvieron representados ayer en el Almuerzo Mensual de AMCHAMDR. “Otras empresas han encontrado agujeros fiscales para cobijarse bajo el manto de los parques de zonas francas, sin tener una participación en el proceso de manufactura”, criticó.

Aseguró que se está cometiendo un abuso con el carnet de exención del
ITBIS otorgado a las zonas francas, en principio para la compra de insumos en el mercado local. “Hemos detectado que se está utilizando en la adquisición de bienes y servicios para beneficio personal; en compras tan diversas como equipos para el hogar, electrodomésticos, consumo en restaurantes, gastos de viajes y otros”, expresó. Calculó que solo en el último año se compraron más de RD$1,500 millones por esos conceptos. “Así, definitivamente, no se puede”, advirtió.

Y poco después informó (no se le escuchó complacido al decirlo) que en el período 2010-2016, bajo la sombrilla de leyes de exenciones e Impuestos Únicos, ingresaron al país 32 Ferrari, 18 autos Mercedes Benz deportivos, cinco Rolls Royce, cinco Porsche, cuatro Lamborghini, cuatro Bentley, un Mercedes Benz Maybach, un Aston Martin y dos yipetas Lexus blindadas. “Y esto es solo una pequeña muestra del total”, indicó.

Lamentó que un país con tanta pobreza y necesidades básicas insatisfechas esté ofreciendo exenciones del impuesto sobre la renta a empresas de capital extranjero que al final terminan pagando dicho impuesto en su país de origen, pues tributan bajo el régimen de renta global. “De esa manera, el país termina cediendo base tributaria a países ricos, como Estados Unidos o España. El hecho de que los accionistas de zonas francas no paguen el impuesto a los dividendos a pesar de estar gravados por ley y a pesar de que la mayoría de los inversionistas extranjeros deben pagar en sus respectivos países, es algo tan absurdo que no merece comentarios”, dijo.

Destacó que el 90% de ese impuesto es pagado por el 1% más rico de la población. “Por eso el cabildeo que hacen algunos sectores para no pagar o para que se elimine este impuesto es casi indignante. Es el impuesto más progresivo que tiene el sistema en uno de los países que exhibe mayor desigualdad del continente”, sostuvo.

Magín citó algunos ejemplos para ilustrar lo que ocurre con el ITBIS, entre ellos: La amplitud de las exenciones existentes que estimulan a muchas empresas a elevar artificialmente la participación en las ventas de los bienes exentos en el total, lo que deja en manos de estas empresas un ITBIS cobrado que pertenece al Estado dominicano. También citó el acostumbrado uso de facturas con número de comprobante fiscal (NCF) que permite utilizar como crédito de
ITBIS a los propietarios de las empresas, las compras de bienes y servicios de consumo personal.

Frenará rebeldía china y asociaciones comercio

“Señoras y señores, pagar impuestos no es una manifestación de solidaridad o una concesión particular. Es un deber fundamental establecido en la Constitución”, les dijo Díaz al amplio auditorio que acudió a escucharlo. “Por eso, como Administración Tributaria tenemos la obligación de hacer cumplir a todos de acuerdo a lo que dispone nuestro ordenamiento jurídico; y además encausar todas las acciones y recursos necesarios para combatir la evasión fiscal. Esto sin privilegios para nadie ni tratos discriminatorios entre contribuyentes”, apuntó.

De otro lado, Díaz citó dos situaciones con sectores comerciales que han desafiado a la autoridad tributaria desacatando leyes y normas del sistema. Se refirió a los comerciantes chinos y a los comerciantes que se oponen a la instalación de las soluciones fiscales.

“Los chinos de la Duarte y zonas aledañas, que operan negocios 100% en efectivo para no pagar ni ITBIS ni Impuesto sobre la Renta. A todos ellos le decimos: “Su carnaval pasó, o pagan o cierran, así de sencillo”, sentenció.

Dijo que lo mismo sucede con sectores a los que llamó “abanderados del chantaje”, para referirse a agrupaciones comerciales, o comercios individuales que se niegan a la instalación de las impresoras fiscales y hasta amenazan la paz anunciando protestas para impedir que la DGII instale esos equipos.

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