Las autoridades españolas entregaron ayer en extradición a Ambiórix Nepomuceno Rodríguez, acusado del asesinato de la abogada Paola Languasco Jiménez, ocurrido en abril de 2015 en la ciudad de Santiago.
La extradición fue otorgada por las autoridades españolas, a solicitud del Ministerio Público dominicano ante el Juzgado Central de la Instrucción 001 de Madrid, España.
Nepomuceno Rodríguez, principal acusado del crimen, fue traído al país por el Aeropuerto Internacional de las Américas (AILA), en el vuelo 6501 de la línea Aérea Iberia, que aterrizó a las 3: 50 de la tarde procedente de Madrid.
La extradición se produce luego que quedaran extinguidas las responsabilidades penales que tenían pendientes en el Reino de España.
“Yo soy inocente de todo, inocente de todo, no he huido, vivo allí en España”, manifestó tras su llegada al AILA y momentos antes de ser conducido a la fiscalía de la ciudad de Santiago, donde el Ministerio Público le solicitará medidas de coerción por varios crímenes cometidos en las provincias Santiago y Duarte, contra Paola Languasco y Fausto Rivera Bobonagua, respectivamente.
La jurista de 37 años fue reportada desaparecida el 6 de abril de 2015 y 18 días después su cadáver fue hallado con varios disparos de arma de fuego envuelto en una funda plástica en Santiago.
Otros acusados
Por el caso, en julio de 2017 el Segundo Tribunal Colegiado de Santiago condenó a 20 años de prisión y al pago de RD$2 millones de indemnización a Cristino Mármol (Franklin) y Lariel Pichardo, tras ser hallados culpables de lanzar el cuerpo de la joven en la alcantarilla.
Ambos fueron juzgados por asociación de malhechores y complicidad en la muerte de la joven profesional del derecho.
Familiares de Paola exigen condena máxima
A cuatro años y seis meses del suceso contra la jurista sus familiares se mantienen ansiosos y con sed de que se haga justicia. Su padre Leopoldo Languasco y su hermano Liwiski Languasco esperan que contra Nepomuceno Rodríguez sea emitida la condena máxima de 30 años de prisión y que se envíe el mensaje de que un crimen tan horrendo no puede quedar impune.
