Los puentes entre tecnología y naturaleza, la síntesis entre molecular y biotecnología, están cambiando nuestra percepción de la naturalidad que ha experimentado un proceso de transformación.
Hemos llegado al antropoceno: la edad de los humanos; la época geológica actual refleja el impacto directo del hombre sobre la Tierra. Este concepto fue acuñado en el año 2000 por el premio Nobel de química holandés Paul Crutzen y vuelve a centrarse en nuestra atención gracias a Yuval Noah Harari en su obra Sapiens.
El impacto de la humanidad en la tierra ahora es tan profundo que los expertos declararon esta nueva época geológica en la que las conexiones globales de las que dependen todos los seres vivos se están desmoronando. Estamos viviendo más tiempo que nunca, nuestra población está creciendo, ya no se puede negar el cambio climático, mientras que la biodiversidad se está reduciendo drásticamente.
No es de extrañar que la biología se haya convertido en una de las plataformas tecnológicas más importantes del siglo XXI, ya que estamos buscando soluciones para que nuestro planeta y nosotros prosperemos nuevamente.
La biotecnología molecular moderna, o la implementación de nuestro conocimiento del genoma para diseñar organismos, ofrece nuevas soluciones a los desafíos actuales. Nuevas soluciones de Human Enhancement o para avances en el significado de la naturaleza basadas en el Green Tech, son las micro-tendencias de esta nueva década.
La síntesis entre molecular y biotecnología ha dado lugar a una nueva percepción de la naturaleza. Los constantes desarrollos tecnológicos y los nuevos hallazgos en micro y macro biología demuestran que las limitaciones de la naturaleza ya no parecen ser absolutas. La naturaleza está formada por manos humanas.
Por ejemplo, en Julio 2019, Elon Musk, fundador de Tesla y otros emprendimientos de alto nivel, anunció que probó un microchip cerebral en monos, y le permitió a uno controlar una computadora con su cerebro.
¿Cuáles son los conductores que habilitan esta tendencia?
Los avances tecnológicos, la conectividad y biotecnología, han proporcionado una nueva forma de percibir y modificar. Las personas quieren mejorar sus cuerpos para aumentar el rendimiento o superar sus propias restricciones.
¿Qué deberían aprender científicos dominicanos?
Materiales Inteligentes, Prótesis Inteligentes, Interfaz Computadora-Cebrero, Nanobots, Bio-electrónica, Ingeniería Médica, Bio-ingeniería, Agricultura de Laboratorio, Edición Genómica, Bio-Interfaces, Tecnologías Agrícolas, Cosecha Robótica, Nano-Ingeniería y Terraforming.
Las innovaciones tecnológicas ya no representan una prótesis o extensión añadida, sino que se están convirtiendo en una parte importante de nuestra vida, amplificando nuestra esfera de actividad. La biotecnología molecular y la nanotecnología modernas, la neurociencia y la ingeniería médica brindan soluciones profundas a los desafíos actuales.
Incluso la creación de nueva vida ya no es solo un gran pensamiento sino una realidad. La tecnología CRISPR/Cas *, por ejemplo, es un método mediante el cual se puede editar el genoma de los organismos vivos. Esta tecnología fue utilizada recientemente por China para secuencia el genoma del Coronavirus, permitiendo probar nuevos tratamientos, incluso los experimentos que fallaron ofrecieron pistas vitales para guiar a los investigadores sobre dónde deben enfocarse.
Las autoridades deben incluir la tecnología para contrarrestar los principales desafíos mundiales como el hambre y la contaminación, debemos potenciar a los investigadores para estudiar detenidamente las soluciones biotecnológicas que mejorarán la vida de los dominicanos.
La biotecnología se ha expandido para incluir nuevos y diversas ciencias y técnicas para crear productos que ayuden a contrarrestar el daño que hemos causado al planeta y encontrar soluciones a nuestras crecientes cifras de población. Como isla, debemos mirar hacia el futuro.
