Las honras fúnebres serán el sábado en la funeraria Blandino de la lincoln, a partir del mediodía
El destacado cineasta dominicano Claudio Chea, uno de los creadores de la imagen cinematográfica dominicana, ha muerto en la madrugada de este miércoles 13 de julio.
Según fuentes familiares, el destacado director de fotografía falleció de un infarto a las 3:00 de la madrugada en la Clínica Abreu.
Claudio Chea, junto a Fernando Báez y a Peyi Guzmán fueron (son) los tres horcones principales de una manera de mostrar la imagen dominicana, si es que la hay, de la cual han bebido las nuevas generaciones de cineastas.
Nacido en 1950, Claudio Chea se inició como camarógrafo siendo un adolescente en 1966 con el “Noticiario Dominicano”, donde estuvo laborando hasta 1968. En 1969 labora con la productora “Fílmica Dominicana”; y con apenas 19 años, en 1969 completa sus estudios de cine en el “New York Instituto de fotografía”.
En los años 70 se enrola en la dinámica de comerciales y documentales para la televisión en Santo Domingo, siendo parte importante de “CINEMATEC, Guede Films”.
En 1978 decide crear su propia productora, “Claudio Chea Films”, que en 1981 pasó a llamarse “Videotel”.
Claudio Chea como cinematógrafo marcó un antes y un después en la fotografía cinematográfica dominicana, a la cual entregó más de cuatro décadas en la industria de producción audiovisual. Sin su ojo artístico sería imposible recordar la belleza de aquellos comerciales de TV que indagaron de forma humorística-folclórica y poética en las tradiciones de todas las regiones del país.
En 1985 realiza el documental Camino al Pico Duarte y en 1987, El paseo de la virgen.
El director de fotografía fue un asiduo profesional en los trabajos del cineasta cubano-norteamericano León Ichaso, en películas como Crossover Dream (1985), Zooman (1995), Azúcar amarga (1996), Ali: An American Hero (2000), Hendrix (2000) , Piñero (2001) y El cantante (2006), al igual que el trabajo fotográfico para Washington Heights (2004) de Alfredo de Villa.
Chea también estuvo involucrado en otras cintas para la televisión norteamericana como Free of Eden (1999), protagonizada por Sidney Poitier.
Su amor por el cine era total, y tenía además algunos proyectos y guiones de su creación, como «El Bailón».
En 2018 recibió el título de Profesor Honorario de la UASD.
