Los nuevos talentos se enfrentan a la falta de experiencia práctica y a la competencia en un mercado en maduración
En la vida laboral y académica, la Gestión de Proyectos emerge como un área crucial para navegar cambios, adaptaciones e imprevistos con precisión. Apoyarse en ella puede ayudar a ahorrar tiempo, planear mejor y dar un seguimiento oportuno en lo que estamos enfocados.
Paloma de la Luz Ruíz, docente de la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) y con experiencia en proyectos sociales y sector público, comparte sus perspectivas sobre este campo, comenzando por las oportunidades y desafíos que enfrentan los jóvenes profesionales en el país.
Ruíz señala que, si bien existe un creciente reconocimiento de la importancia del manejo de proyectos, los nuevos profesionales a menudo se enfrentan a la falta de experiencia práctica y a la competencia en un mercado en maduración.
“Como docente en la maestría de Gestión de Proyectos de la UNPHU, he podido observar cómo los estudiantes y profesionales que cursan la maestría enfrentan este reto, pero al mismo tiempo tienen la oportunidad de fortalecer sus competencias a través de la formación teórica y práctica que reciben”, dijo.
Visualiza un futuro para la Gerencia de Proyectos en el país evolucionando hacia enfoques más ágiles, colaborativos e integrados con tecnologías como la inteligencia artificial y el análisis de datos, permitiendo una toma de decisiones más informada y una mayor eficiencia, además de una formalización creciente en diversos sectores.
También espera ver que la adopción de metodologías estructuradas sea más común, en especial,en el ámbito público y en pequeñas y medianas empresas.
Para evitar errores frecuentes como la falta de planificación, la comunicación deficiente y el control inadecuado de los cambios, Paloma enfatiza la necesidad de una buena programación, una estrategia de comunicación clara y la implementación de técnicas estandarizadas. Hay que combatir la falta de control sobre los cambios en el alcance, lo que afecta la calidad y el costo final del proyecto.
Señala la importancia de la colaboración entre el sector público y privado para impulsar proyectos de desarrollo abordando como caso de análisis el anuncio del cierre de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), lo que ha generado una ola de incertidumbre, ya que, durante décadas, fue uno de los principales aliados para el financiamiento de proyectos sociales.
Ahora el sector público y el privado tienen el reto de establecer un marco de cooperación claro, donde ambas partes definan roles y responsabilidades.
En el contexto dominicano, Ruíz recomienda herramientas y metodologías adaptadas a las particularidades locales, como PMBOK y SCRUM, que ofrecen estructura y flexibilidad. La metodología de Marco Lógico tiene que estar en la conversación porque ha sido muy usada en proyectos con cooperación internacional, oenegés y sector social.
La profesora sugiere la “Guía Metodológica General para la Formulación y Evaluación de Proyectos de Inversión Pública 2017”, un documento que considera como referente para la gestión de proyectos de inversión pública.
“Mi consejo principal es nunca subestimar la importancia de una planificación sólida”, afirma Ruíz. “Además, es crucial mantener una comunicación constante y transparente con todo el equipo y los interesados”.
Recomienda no temer a los cambios y subraya la relevancia del liderazgo para inspirar y motivar al equipo. “Promover la innovación y la creatividad en la gestión de proyectos es una de las mejores formas de generar soluciones únicas, especialmente en contextos donde los recursos pueden ser limitados”, dijo.
Para los jóvenes, recomienda una formación integral y la certificación en modelos reconocidos. Es fundamental contar con un liderazgo sólido y un patrocinador comprometido, así como mejorar el seguimiento y control de los proyectos mediante métricas de desempeño.
Cultiva habilidades de liderazgo
“Participar en programas de maestría o capacitaciones, como los que ofrece la UNPHU y otras instituciones académicas, les permitirá adquirir los conocimientos más actualizados y desarrollar una visión estratégica que los distinga en el mercado laboral. También es significativo que se certifiquen en metodologías reconocidas a nivel internacional y que sigan cultivando habilidades de liderazgo”. Ruíz alenta a los profesionales a crear su propio estilo, combinando lo técnico, lo humano y lo estratégico.
Piensa que el futuro de la gerencia de proyectos en RD se dirige hacia una mayor profesionalización e innovación, y aquellos que se adapten al cambio continuo serán los líderes del desarrollo del país.