En una pequeña tienda de productos capilares orgánicos, Elizabeth Florián reorganiza los estantes con una nueva confianza en . Sus ojos brillan mientras habla de sus planes de expansión y de cómo ha aprendido coas nuevas: «Tengo una visión más clara de hacia dónde quiero llegar y las herramientas para lograrlo.»
Elizabeth es una de las más de 2,000 mujeres dominicanas cuyas vidas han sido transformadas por el programa «Mujeres con Propósito» de PepsiCo. Este programa, relanzado recientemente en el país en colaboración con FUNDES Latinoamericana, ofrece capacitación gratuita a mujeres emprendedoras y profesionales, dotándolas de habilidades críticas para el éxito en el competitivo mundo laboral actual.
«Es una iniciativa que necesitamos para seguir aprendiendo, de la mano de excelentes mentoras,» afirma Elizabeth. El impacto del programa va más allá de los números. Carmen Neli Méndez, otra participante, comparte cómo el programa ha cambiado su perspectiva: «El programa me ha permitido descubrirme y entender mi potencial. Ahora impulso mis proyectos con confianza, amor y respeto.»
Pero quizás la historia más inspiradora es la de Milagros Guillén. Como líder del proyecto social «Horizonte Inclusivo», Milagros busca desarrollar el talento de personas con discapacidad y conectarlas con empresas. «Invitaremos a empresarios valientes, que quieran cambiar el mundo, generando oportunidades de empleo para nuestro personal,» declara con pasión.
Paula Santilli, CEO de PepsiCo Latinoamérica, resalta la importancia de estas iniciativas: «En cualquier compañía, donde tenemos equidad de géneros, nos va mejor. La calidad fluye, la productividad fluye, las horas de mantenimiento y ausentismo disminuyen, la organización interna mejora. Ir hacia ser una mejor empresa y país tiene que ver con darle oportunidades parejas a hombres y mujeres.»
Santilli enfatiza el potencial inexplorado de las mujeres en el ámbito laboral: «Las mujeres tienen capacidad y ganas de crecer, y lo que hacemos con esas mujeres es meterlas en un lugar en el que puedan crecer, alcanzar su máximo potencial.» Añade: «Hay muchas posibilidades de empleo y debes venir a trabajar a un lugar que como mujer te proponga un ecosistema que te eleva, ese es nuestro trabajo, queremos retener a esas mujeres y darles un plan de carrera.»
El impacto de empoderar a las mujeres se extiende más allá del lugar de trabajo. «A una mujer con capacidad se le paga mejor y esa mujer puede ir a su casa e invertir en educación, salud, vivienda, en dar una mejor vida a su familia, en generar una familia más próspera,» explica Santilli.
Sin embargo, Santilli reconoce que aún existen barreras culturales por superar: «Las mujeres han sido entrenadas para quedarse calladas y eso no sirve para nada, tienes que expresar tu opinión sin miedo porque tienen la capacidad para hacerlo.» Su mensaje final es un llamado a la acción: «No hay nada mejor que una mujer con ambición, que quiera crecer. Suelta las amarras y muestra todo lo que puedas lograr.»
El programa «Mujeres con Propósito» es más que una iniciativa corporativa; es un catalizador de cambio social. Con una nueva inversión de más de 3 millones de pesos dominicanos y planes para certificar a 600 mujeres adicionales, PepsiCo está demostrando que el empoderamiento económico de las mujeres no es solo una meta noble, sino una estrategia efectiva para el desarrollo inclusivo.
Mientras Elizabeth, Carmen, Milagros y cientos de otras mujeres dominicanas continúan su viaje de crecimiento y autodescubrimiento, queda claro que el verdadero poder de «Mujeres con Propósito» radica en su capacidad para desencadenar el potencial latente en cada participante. En un país donde las oportunidades económicas para las mujeres han sido históricamente limitadas, este programa está abriendo puertas y cambiando narrativas, una mujer a la vez.
