Santo Domingo.- A propósito de la baja matriculación en las carreras de Humanidades, otra carrera afectada por este fenómeno es la de Antropología, la ciencia que estudia integralmente todas las manifestaciones humanas.
Hoy en día, las instituciones públicas y las empresas necesitan contar con un conocimiento profundo y particularizado sobre aspectos individuales o colectivos de la realidad humana, de modo que puedan aprovechar ventajas competitivas. Es el antropólogo quien se encarga de ofrecer soluciones contextualizadas a las realidades complejas que presentan los desafíos sociales, culturales y ambientales.
Como ejemplo, vemos que en la actualidad nuestro país cuenta con 24 ministerios y más de 60 direcciones nacionales, los cuales requieren, en las licitaciones de sus programas y puestos, la participación de antropólogos en el diseño de políticas públicas, planes educativos, estrategias de desarrollo comunitario y programas patrimoniales y ambientales. Sin embargo, a diferencia de muchas otras carreras que tienen un mercado laboral saturado, la Antropología solo gradúa unos pocos profesionales cada año.
Es por ello que el presidente de la Asociación de Estudiantes de Antropología de la UASD (ASODEA), Josué David Javier De La Rosa, invita a quienes se interesen en los problemas prácticos de la cultura, la sociedad y la identidad dominicanas a cursar la carrera de Antropología.
Aunque muchas personas no lo sepan, la Antropología está presente en nuestras conversaciones diarias. Hablar de remedios caseros es referirse a la etnomedicina, y discutir sobre costumbres o creencias es adentrarse en la Antropología sociocultural. Esta disciplina no solo nos ayuda a comprender quiénes somos y cómo vivimos, sino que también permite identificar problemáticas sociales y culturales, y proponer soluciones contextualizadas. Por ello, es fundamental fomentar su estudio y difusión.