Una acción dirigida contra el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jameneí, “cerraría la puerta” a cualquier acuerdo o negociación y provocaría una “respuesta ilimitada”. Así lo informó el domingo Reuters, citando un alto funcionario iraní.
“Para Irán, ese acto sería considerado como el cruce de todos los límites y justificaría una respuesta ilimitada e irrestricta”, declaró el informante.
Esta semana, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró que el asesinato de Jameneí no escalaría el conflicto, sino que, al revés, lo terminaría. Por su parte, el presidente de EE.UU., Donald Trump, afirmó que su país sabe dónde se esconde el líder supremo iraní y que “es un blanco fácil”. El propio Jameneí tildó de “amenazantes y ridículas” las recientes declaraciones del presidente estadounidense.
Asimismo, Trump, intensificó su retórica contra Irán con declaraciones de advertencia hacia el ayatolá. “Sabemos exactamente dónde se esconde el llamado ‘líder supremo’. Es un blanco fácil“, aseveró.
A su vez, el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, calificó de “alarmante” las afirmaciones del jefe del Gobierno israelí, denunciando la falta de voluntad de Tel Aviv para entrar en la vía pacífica de resolución de la crisis con Teherán.
Además, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, expresó que no quiere siquiera discutir la posibilidad del asesinato de Jameneí.