Cinco partidos de oposición que alegan que las pasadas elecciones fueron fraudulentas anunciaron ayer que entregarán un dossier con las supuestas pruebas de las irregularidades a los cancilleres que vendrán al país a propósito de la Asamblea General Ordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) que se hará en el país a partir del próximo lunes. Los partidos Revolucionario Moderno (PRM), Alianza País, Fuerza Nacional Progresista (FNP), Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC) y Alianza por la Democracia (APD) hicieron el anuncio en una rueda de prensa, cuyo vocero fue el presidente del PRM, Andrés Bautista; Fidelio Despradel, en representación de Alianza País; Max Puig, de APD; Vinicio Castillo, por la FNP; Ricardo Fortuna, por el PQDC y Ada Barriola, en representación de Soraya Aquino, excandidata presidencial del Partido de Unidad Nacional (PUN).
“Los pueblos de América Latina deben ser informados, a través de sus representantes, que en República Dominicana se produjo un fraude electoral en las elecciones presidenciales, congresuales y municipales que ha significado un grave retroceso democrático y de su sistema electoral, lo que amenaza la gobernabilidad democrática de esta nación”, señala un documento leído en una conferencia de prensa en un hotel de la capital.
Según expresa el documento, los partidos de oposición afirman que hubo un retroceso democrático en el país. “Los valores de democracia y de procesos electorales libres, limpios y transparentes y el respeto de los mismos son compromisos comunes en los países miembros de la OEA, por lo que hemos considerado como una acción legítima y pertinente denunciar a nivel internacional el proceso electoral fraudulento ocurrido en la República Dominicana el pasado 15 de mayo”, concluye el documento opositor.
Afirman que escrutinio no fue transparente
Los partidos de oposición señalan que sus denuncias son en consonancia con los informes de los observadores internacionales de Unasur, OEA y Uniore, que coinciden en el hecho de que se ha “producido un retroceso electoral, que ha impedido que los resultados de escrutinio estén rodeados de la transparencia y credibilidad para revestir de legitimidad a las autoridades electas”.
