SAO PAULO. Fiscales brasileños quieren que los organizadores del Mundial de 2014 y la FIFA paguen cerca de dos millones de dólares por indemnizaciones.El procedimiento es debido a irregularidades en los boletos en una sede de la Copa Confederaciones.
Fiscales del estado de Pernambuco dijeron que los organizadores no cumplieron con los servicios prometidos a los aficionados que acudieron a la Arena Pernambuco durante el torneo previo a la Copa del Mundo, especialmente en lo referente a los asientos elegidos.
Muchos aficionados se quejaron de que los asientos no eran tan buenos como se los prometieron al comprarlos. Entre los aficionados descontentos están algunos que compraron las localidades más caras para los juegos en la Arena Pernambuco. El agente de FIFA encargado de las ventas, Match Services, también está demando y fueron multados este mes con más de 200 mil dólares cada uno por autoridades defensoras del consumidor por los problemas en Recife.
