Santiago. En Los Cerros de Papatín del sector Bella Vista, las viviendas sufren los efectos de los constantes deslizamientos de tierra.Las organizaciones comunitarias estiman en 20 las familias que viven en techos de hojalata y cartón, o de cemento, levantadas entre cañadas donde corren el riesgo de perder sus vidas.
Las más recientes lluvias pusieron al desnudo la gravedad en que viven. El año pasado, una mujer identificada como Benita murió aplastada por una pared mientras dormía en su vivienda.
La anciana María Virginia Batista, quien reside junto a seis familiares, en su casucha de madera, remendada con cartón, lleva 60 años en medio de la estrechez, por lo que espera la asistencia del gobierno central o la alcaldía para ser llevada a un lugar más seguro. Junto a María Virginia comparten el techo cuatro nietos incluido un recién nacido. Se quejan que no han recibido ayuda de parte de las autoridades competentes.