Para Félix Sánchez, 34 años y los mayores logros del atletismo, estos Juegos son una despedida. Para Luguelin Santos, 17 años y el atleta más joven en obtener frutos, son la bienvenida.Cara y cruz para cada uno de esos atletas es lo que enfrentaron en estos XVI Juegos Deportivos Panamericanos, que se disputan en Guadalajara, estado de Jalisco.
“Estos son mis últimos Juegos”, manifestó Félix. “Me retiro”, pero eso sí, “a nivel panamericano”, pues el medallista dorado de los Juegos Olímpicos de 2004, espera retirarse en la contienda olímpica de Londres en 2012.
“En 10 o 12 años, cómo ha cambiado este deporte en mi país”, manifestó Sánchez a la prensa internacional.
El vallista dorado de Atenas 2004 y dos veces campeón mundial, para nada se equivoca.
Hace 12 años, Luguelin tenía tan solo cinco años y ni siquiera pensaba en que la pista de atletismo sería su destino. De hecho fue en 2006, cuando hubo pista en Monte Plata para los Juegos Deportivos Nacionales y en ese entonces, Luguelin solo tenía 12 años.
De esa manera no hay que mirar una década atrás, pues Luguelin, que se inició en Bayaguana, municipio de Monte Plata y donde está la pista, cuatro años después de que se montó esa instalación, se hizo con la medalla de oro de los primeros Juegos Olímpicos Juveniles Singapur 2010, así como del oro de ese evento en el relevo de 4×400 al formarse el equipo de Las Américas.
Y ya en este año, en Guadalajara, en el Estadio Telmex de Atletismo, Santos quebraría el récord nacional de 400 metros planos que poseía hasta el pasado 26 de octubre, Félix Sánchez.
“Él –Sánchez- es mi ídolo”, dijo Santos. “Pero no lo podía creer”, dice refiriéndose a cuando escuchó el tiempo realizado en la prueba de los 400 metros planos, 44.71, con el que quebró la marca de Sánchez, que era de 44.90.
Sánchez, conocedor de que estos son sus últimos Juegos, muestra su satisfacción por lo que ve en el atletismo dominicano.
“Me llena de emoción ver el futuro del atletismo dando los pasos detrás de mí”, manifiesta el vallista, quien cayó de forma atropellante en la final de los 400 metros con vallas.
“Veo que nuestro país tiene un gran futuro en este deporte”.
Nueva figura
Con la plata alcanzada por Luguelin en Guadalajara, sin quizá el representante del atletismo más joven dominicano en hacerse de una medalla en unos Panamericanos, lo ratifica como el nuevo rostro del atletismo dominicano.
“Hace tres años atrás no era nadie, como quien dice. Nadie me conocía, surgieron los Juegos Escolares y de ahí me fui destacando, hasta que empecé a entrenar con Ludwig (Rubio)”, su actual entrenador.
A sus 17 años (cumple 18 en noviembre) él prefiere tomar las cosas con cautela. “Se siente un reto muy grande para mí. Hay mucha responsabilidad”, señala, como si supiera por todo lo que pasó Félix en cada competencia en que el país le daba seguimiento.
Récord y plata en Guadalajara, dos oro en Singapur y espera más. Aunque en realidad nunca pensó que lograría tanto en poco tiempo.
“No esperaba tanto tan rápido. Le doy gracias a mi Dios, a Jesucristo”, señala. “Mi gran deseo es una medalla olímpica y soltar lágrimas en ese podio”, dice pues recuerda que la emoción sentida en Singapur le impidió irse en llanto.
Con apenas 17 años nadie piensa que ha llegado. Es buena edad para expandir alas y volar. Y en esa dirección avanza Luguelin Santos.
“He entrenado duro para esto y para más porque mi meta es darle a mi país una medalla olímpica, ese es mi meta. Eso significa muchísimo”.
El joven, hijo de una humilde familia de la comunidad de Bayaguana formada por los señores Juan de los Santos e Irma Aquino Méndez, es la gran esperanza del atletismo dominicano luego de su participación sobresaliente en los Primeros Juegos Olímpicos Juveniles en agosto pasado en Singapur y recientemente en los Juegos Panamericanos que se desarrollaron en la ciudad de Guadalajara y que será bien recordada por el brillante atleta.
Una felicidad que cambió en segundos
El pasado miércoles, la clasificación para la final de los 400 metros con vallas resultó sin complicaciones para el dominicano Félix Sánchez, quien cruzó segundo en su heat. Sánchez detuvo su tiempo en 50.22, dos centésimas más que Suguimati (50.20), pero además alcanzó el sexto mejor tiempo luego de finalizados los tres heats, de los cuales al dominicano le tocó el segundo. Al día siguiente, las cosas no fueron las mismas para Sánchez. Pese a que conquistó el bronce, una lesión en su hombro derecho le cambió la felicidad. Al llegar a la meta tropezó y cayó sobre su hombro derecho, quedando evidentemente lastimado y su sueño de oro escapado.
Aunque inicialmente se negó a recibir ayuda médica, finalmente, luego de la premiación, debió ser transportado en ambulancia al hospital de la Villa Panamericana.
