A pesar de que las ARS y la Sisalril han condenado la práctica admitida por urólogos y ginecólogos, la Dida aún no ha dicho nada.La sala de espera de la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados a la Seguridad Social (Dida) lucía ayer abarrotada de personas que acudieron a hacer distintos reclamos y gestiones, entre ellas cobros fuera de facturas por parte de algunos médicos.
José Fernández, de 57 años, dijo que pasó un mal momento debido a que en una clínica de la avenida Independencia una secretaria le pidió RD$3,500 extra y en efectivo, luego de haber pagado los servicios de dos días de internamiento de su esposa.
“Me le regué y dejaron eso así, pero me dijeron que ese dinero era por servicios extra del doctor especialista; por eso estoy aquí porque en Senasa, que es mi seguro, me dijeron que venga aquí a la Dida a denunciar lo que me pasó”, expresó.
Mientras que Carlos Antonio Morales, de 59 años, dijo que andaba en busca de que le devuelvan sus aportes de la Seguridad Social, ya que a esa edad nadie le quiere dar trabajo “y ni las ARS quieren darle seguro a uno dizque porque estoy muy viejo”.
Otro caso es el de Ramón Valoy Cueto, de 64 años, quien esperaba que alguien en la Dida le dijera alguna razón por la cual su pensión aún no le sale, a pesar de que la solicitó en el año 2009.
Otra que tuvo que pagar RD$1,700 adicionales en un consultorio de Los Alcarizos fue Inés Bautista, de 36 años, “y lo grave es que fue en efectivo y sin recibo”.
El lunes último, elCaribe públicó la indignación de varios ciudadanos que se quejaron de haber sido víctimas de cobros “por la izquierda”, en efectivos y sin facturas por parte de algunos médicos.
La noticia causó gran revuelo y al día siguiente las sociedades médicas de Urología y Gineco-Obstetricia admitieron que dichos cobros son reales, pero se justificaron culpando a las ARS y a la Sisalril.
La Dida guarda silencio ante denuncia ciudadana
A pesar de las quejas de cobros extra por parte de algunas sociedades médicas y del rechazo a la práctica, por parte de las aseguradoras de riesgos de salud y la Superintendencia de Salud y Riesgos Laborales (Sisalril), la Dirección de Información y Defensa de los Afiliados ha mantenido silencio, a pesar de que su función es orientar al ciudadano cuando confronte problemas.
