Gilbert Kieffer en las Casas Reales

El Museo de las Casas Reales inauguró el pasado jueves la muestra “Signos y vibraciones” del artista multidisciplinar de origen francés Gilbert Kieffer, quien proyecta una propuesta sumamente cosmogónica en una exaltación a la cultura taína,&#823

El Museo de las Casas Reales inauguró el pasado jueves la muestra “Signos y vibraciones” del artista multidisciplinar de origen francés Gilbert Kieffer, quien proyecta una propuesta sumamente cosmogónica en una exaltación a la cultura taína, pero desde una perspectiva muy contemporánea.

Kieffer se apropia de una serie de códigos pre-hispánicos, los cuales combina con elementos de la naturaleza y configura por medio de su arte digital en un ambiente de magia y expresión. Y es que según hemos analizado, el artista busca en sus trabajos proyectar el origen de las culturas, basándose la más de las veces en un estudio que le posibilita exaltar los aportes de las civilizaciones aborígenes como los mayas o los incas y, qué bueno que esta vez los “taínos” descendientes de los arahuacos quienes constituyen nuestros primeros padres, sean el motivo de esta interesante reflexión artística que promueve este inquieto y apasionado creador.

Entonces, “Signos y vibraciones”, a nuestro juicio es una muestra que revela además de la formación artística de Gilbert Kieffer, su inclinación por la filosofía, logrando en cada pieza una fusión que integra: arte-filosofía, pero además historia e identidad. Este conjunto de elementos vistos a partir de una pieza, permite conceptualizar ampliamente y posibilita además multiplicidad de lecturas, pero casi siempre apegadas a los orígenes, a las tradiciones, pero fundamentalmente a los mitos donde el pez asume un papel protagónico. De manera que mitos, alegoría y otros códigos forman parte del re-juego composicional que con un espíritu hasta cierto punto enigmático refleja los mensajes de un universo a veces perdido en el tiempo, otras, tan presente como los rastros de su paso por este cosmos, ya sea por la memoria histórica o por tener al hoy como antecedente inmediato al aborigen.

Muy acertada la iniciativa de la Dra. Ana Yee de Cury como directora del Museo de las Casas Reales al abrir las puertas de la institución para que los dominicanos y dominicanas podamos disfrutar de un arte con influencias locales realizado por un artista extranjero, de ahí que el arte no tiene fronteras.

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