En la Policía se agota el combustible para patrullar

La Policía Nacional enfrenta una crisis de combustibles que afecta incluso el abastecimiento de los vehículos utilizados en el patrullaje preventivo.

La Policía Nacional enfrenta una crisis de combustibles que afecta incluso el abastecimiento de los vehículos utilizados en el patrullaje preventivo.La información fue suministrada a este diario por oficiales que aseguran que la situación los afecta directamente, debido a que les quitaron una asignación de 2 mil pesos que recibían mensualmente para echar gasolina.

Ayer, reporteros de elCaribe visitaron algunas de las estaciones habilitadas por la Policía para proveer combustibles, pero los empleados dijeron que no había gasolina. “No, comando, no hay combustibles”, dijo un agente asignado a la estación de combustibles del Campamento Duarte, en respuesta a un coronel que preguntó que si aún no había llegado la gasolina. “La poca que hay es para las patrullas de la Policía”, dijo el uniformado. Esta situación ha provocado que haya menos vehículos patrullando en las calles y barrios para prevenir el delito.

Fuentes policiales atribuyen esta situación a una supuesta deuda que tiene la Policía con la empresa abastecedora del carburante. La persona que sirvió de informante dijo que actualmente la Policía recibe unos 70 millones de pesos para el suministro de combustibles de la institución. “Una parte de ese combustible va a parar a los tanques de vehículos de particulares, y de oficiales que lo utilizan para sus vehículos privados, y no para uso interno de la institución”, dijo la fuente.

Ayer, el vocero de la Policía, coronel Jacobo Mateo Moquete, negó que haya crisis de combustibles en el cuerpo responsable del orden público, a pesar de que un empleado de la estación del Campamento Duarte dijo que ese lugar no hay gasolina. Moquete dijo que el jefe de la Policía, mayor general Manuel Castro Castillo, ha instruido a sus subalternos para que pongan control en la política de distribución de gasolina.

“Hay que estar debidamente identificado y debe saberse quién y para qué es ese combustible que se está echando”, dijo el vocero policial. Sin especificar si con sus palabras aludía a policías o particulares que también se benefician de ese combustible, Moquete indicó que “el combustible de la Policía no es para irse para Montecristi ni para Samaná de fin de semana”. Moquete se resistió a identificar a las personas a quienes se refería.

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