Un justo campeón

Alemania se proclamó campeón del mundo el pasado domingo tras ganar a Argentina por 1-0 en el Maracaná de Río de Janeiro. Un gol en tiempo extra de Mario Gotze, jugador del Bayern de Múnich, vio a los teutones superar a su contraparte sudamericana&#8

Alemania se proclamó campeón del mundo el pasado domingo tras ganar a Argentina por 1-0 en el Maracaná de Río de Janeiro. Un gol en tiempo extra de Mario Gotze, jugador del Bayern de Múnich, vio a los teutones superar a su contraparte sudamericana en una final táctica y emocionalmente intensa.
Lograron así los germanos quitarse de encima el mote de ‘eterno segundón’ que le había valido la cadena de segundos y terceros puestos en competiciones oficiales que apilaban desde 2002.

Del campeonato de los alemanes se puede decir que ha sido bastante bueno, rayando lo notable. Pasadas unas cuantas inseguridades iniciales, el equipo alemán logró entrar en un ritmo de juego que les vio desarrollar cerca del mejor fútbol del torneo, haciendo clímax todo, en cuanto a calidad de fútbol, quizás no tanto durante la final como durante el 7-1 contra Brasil, indudablemente el partido más contundente de toda la Copa.

Pasada la fiesta y puesto todo en perspectiva, uno no puede hacer más que quitarse el sombrero ante el trabajo de un grupo de jugadores y de técnicos que, siguiendo las pautas de un proyecto que empezó con Klinsmann en 2006, logró la consecución del título en tierra carioca de la mano de un fútbol atractivo y un equipo de una actitud y de una efectividad demoledora. Sobre Joachim Löw el ahora entrenador de los Estados Unidos había dicho antes que: ‘Con Joachim yo no andaba buscando un segundo entrenador sino un segundo primer entrenador.’ La mano de ‘Jogi’ ha estado presente siempre durante esta larga trayectoria, y en tiempos de resultados extremos y de proyectos cortos en el fútbol, ver a un grupo de trabajo culminar una idea tras largo tiempo de gestación representa un verdadero placer.

Esta Alemania debería dar varias alegrías más. Con una base de jóvenes de 25 años o menos como Kroos, Muller, Gotze, Reus, Schurrle, Ozil, Hummels y demás, se puede aspirar a defender el título en 2018 y a consolidar jerarquía durante la próxima Eurocopa en Francia 2016.

Hasta entonces, en Alemania, esperan celebraciones, copas Das Boot de cerveza y toda la felicidad de saberse, entre su gente, un equipo justamente campeón.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas