Como muestra de la lucha contra la contaminación sónica, el jefe de la Policía y el Procurador de la República encabezaron ayer un acto donde se destruyó más de 1,000 bocinas.
Los equipos de sonido incautados, desde el 2011 hasta el pasado año, fueron destruidos en el sector Villa Juana, en la calles Tunti Cáceres, esquina, Sumner Welles.
Los mismos fueron incautados a personas y establecimientos comerciales que excedían los decibeles permitidos, en plena violación a la Ley 64-00 de Medio Ambiente, y a la 287-04, sobre ruidos.
El procurador Francisco Domínguez Brito dijo que con el acto de destrucción de bocinas se envía un mensaje a aquellos que tienen por costumbre interrumpir la tranquilidad de los ciudadanos. Indicó que dicha acción se repetirá cada mes con las bocinas que sean incautadas en los operativos.
“Así como quemamos las drogas, todos los meses, vamos a destruir las bocinas, sin importar las condiciones en que estén. Queremos con esto tener un Santo Domingo con paz”, agregó.
Asimismo, señaló que a través de las denuncia del Sistema de Atención a Emergencia 9-1-1, tienen en su poder otros 1,000 equipo sónicos, y en los próximos días procederán a su destrucción.
“La sociedad no aguanta más ruido. La cultura de poner bocinas en alto volumen impide el sueño, y el descanso a personas mayores y enfermas, además, de interrumpir el estudio”.
De su lado, el jefe de la Policía, Manuel Castro Castillo, aseguró que la institución ha incrementado su capacidad operativa para llevar la paz a todos los sectores capitalinos. “En los próximos días vamos a incrementar la capacidad del Departamento Especializado Contra Ruidos, para que la labor sea más eficiente, para garantizar que las denuncias sean atendidas en el menor tiempo posible”.
El acto contó con la presencia de la Procuradora Especializada de Medio Ambiente, Francia Calderón, y representantes del Ministerio de Interior y Policía.
