De los vehículos de medio uso que hay en República Dominicana, el 65% corresponde a aquellos que tienen más de cinco años de vejez, y eso pone en evidencia la preferencia de los importadores por adquirir las unidades más económicas posibles. De acuerdo a un estudio elaborado por la Asociación de Concesionarios de Fabricantes de Vehículos (Acofave), para adquirir esas unidades económicas los importadores aprovechan la depreciación, sin importar los efectos negativos que tenga esa decisión para el consumidor y para el medio ambiente.
El estudio de finales de 2014 indica que el segmento de vehículos nuevos en las importaciones representaba solo el 36% del total de autos traídos desde el extranjero, frente al 61% de los autos de medio uso.
En cuanto al parque vehículos dominicanos (o sea, todos los automóviles que existen en el país) continúa creciendo el segmento de los “todoterreno” o SUV, aumentando en un 51.3% la cantidad de unidades en circulación respecto a 2008, año que fue tomado como referencia. Y por otro lado, se indica que desde 2008 el parque vehicular ha aumentado solo 21.4%.La investigación titulada “Situación del sector automotriz en República Dominicana”, auspiciado por Acofave, señala que a raíz de la reforma fiscal de finales del 2012 las ventas se redujeron drásticamente en el primer trimestre del 2013, que pudo ser revertida en parte por la liberación parcial del encaje legal de las instituciones financieras, permitiendo el incentivo del consumo a través de préstamos de bajo interés”. La investigación explica que, aún con estas medidas, las ventas de vehículos fueron ligeramente inferiores al 2012. La recaudaciones directas derivadas del sector automotriz ascendieron en 2013 (el corte más actualizado que muestra el estudio referido) a US$389 millones, de los cuales se estima que el 61% es aportado por los nuevos vehículos, a pesar de que éstos representan solo el 39% de todos los importados.
Acofave asegura que “distorsiones en el mercado automotriz benefician la informalidad en detrimento de la formalidad, perjudicando a su vez a los adquirientes de vehículos y a las recaudaciones del Estado dominicano. Sostiene la organización que los esfuerzos deben enfocarse en la resolución de las causas de la distorsión del mercado para una reactivación real del sector.
Y en otra parte sostiene que el aumento en la cantidad de años de uso que tienen los vehículos usados importados en el país tiene efectos negativos para la balanza comercial, el medio ambiente y las finanzas de los adquirientes. La balanza comercial es el registro de las importaciones y exportaciones de un país cualquiera durante un período.
Abre la puerta al “todoterreno”
El levantamiento realizado por Acofave indica que un aumento de los años de antigüedad permitido para la importación da cabida a la entrada de modelos de automóviles y todoterreno de alto consumo, los cuales por lo general presentan curvas de depreciación aceleradas, haciendo muy tentadora la oferta de adquisición. Ese tipo de aparato que refiere la organización suele también ser de alto consumo de combustible.
El sector automotriz, por la naturaleza de que los autos son bienes duraderos que suponen una inversión significativa de parte del adquiriente y en muchas ocasiones un compromiso financiero de mediano plazo, depende mucho y sobre todo de las expectativas que tengan los consumidores sobre el futuro de la economía.
Más de tres millones de vehículos en movimiento
Como el estudio de Acofave indica que para el sector automotriz el comportamiento de la economía es importante, hay que resaltar que ésta en el primer trimestre de 2015 creció 6.5%, liderando el crecimiento de la región, según el Banco Central. En cuanto al parque vehicular, al 31 de diciembre de 2014 ascendió a 3,398,662 unidades. Eso es 182,889 unidades de nuevo ingreso respecto a 2013. Del total, el 53.1% son motocicletas y el 21.8% corresponde a automóviles.
La mayor parte de los vehículos se encuentran en el Distrito Nacional, Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, con una participación de 27.3%, 16.1% y 8.5%, respectivamente.
En cuanto al tipo de propietarios, el 66.1%, del parque vehicular está registrado a nombre de personas físicas, el restante 33.9% pertenece a personas jurídicas. Si observamos esta variable por género, el 77.8% pertenece a personas del género masculino, mientras que el restante 22.2% al género femenino. En cuanto a la edad del propietario, del total de autos de personas físicas, el 27.7% corresponde a personas con edad entre 36 y 45 años, el 26.4% a personas mayores a 56, el 25.7% a los que se encuentran entre 46 y 55 años, el 17.7% a los que poseen entre 26 y 35 años y el resto a los menores de 25 años.
