La Junta Monetaria (JM) autorizó a los intermediarios financieros a aceptar provisionalmente garantías fiduciarias para otorgar créditos hipotecarios en proyectos ejecutados por programas de fideicomiso público-privado cuyos terrenos todavía carecen de títulos definitivos.
La medida forma parte de un paquete de modificaciones que la JM introdujo en su sesión del pasado jueves al reglamento de evaluación de activos y límites a la concentración de crédito.
En un comunicado que publica en otra parte de esta edición, el Banco Central explica el alcance, beneficios y motivaciones de las decisiones de la JM. El documento está dirigido a edificar a las entidades de intermediación financiera, a los agentes económicos y a la opinión pública en general.
El Banco Central resalta que en su última reunión la JM planteó importantes modificaciones reglamentarias en materia de evaluación de activos y límites a la concentración de créditos, con miras a facilitar el acceso al crédito bancario de proyectos de construcción de viviendas de bajo costo, de infraestructura y redes viales y de los sectores productivos en sentido general.
En primer orden, la JM dispuso que las entidades de intermediación financiera puedan conceder créditos aceptando garantías fiduciarias que permitan fungir como colaterales para la mitigación del riesgo bancario, en el contexto del Reglamento de Evaluación de Activos (REA).
Esta decisión potencializará la Resolución de la JM que dispuso el uso de hasta RD$10,000 millones del encaje legal de los bancos múltiples y las asociaciones de ahorros y préstamos, para destinarlos al financiamiento de préstamos interinos y posteriormente préstamos definitivos a los adquirientes de viviendas de bajo costo hasta RD$2.4 millones, que se edifiquen bajo la figura del fideicomiso, sea público, privado o mixto, en el marco de la Ley 189-11 sobre Mercado Hipotecario y Fideicomiso. Estos préstamos interinos están previstos a tasas de interés de hasta un 6% anual y a un plazo de hasta 2 años, y los canalizados a los adquirientes finales de las viviendas, a tasas de interés fijas de hasta un 8% anual y a plazo de hasta 20 años.
