El país atraviesa una aguda crisis en la producción de agua potable. Autoridades involucradas en este sector advirtieron de medidas que podrían afectar de manera significativa la seguridad alimentaria de la población.El Observatorio de Agua alertó ayer a la población sobre una escasez crítica del líquido, que ha provocado que importantes embalses se encuentren operando en niveles de fatiga.
Según informó el director del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), Olgo Fernández, los únicos dos embalses que están operando de manera normal son las presas Hatillo y Rincón. Los demás están en un estado de “fatiga” con una sequía prolongada.
“Los embalses están en su estado más crítico que se han visto en los últimos 15 años”, advirtió Fernández.
De acuerdo al director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), Alejandro Montás, las presas de Valdesia e Higüey están en un estado crítico en cuanto a su capacidad de almacenamiento.
Dijo que el Gran Santo Domingo experimenta una reducción diaria de 75 millones de galones de agua.
Normalmente los acueductos que suplen de agua a la provincia Santo Domingo y al Distrito Nacional tienen una producción diaria de 400 millones de galones de agua.
Preocupa que todos los días la reducción sea de 5 millones de galones, informó Montás.“La verdad es que no tenemos agua y los pronósticos no son buenos”, agregó. Las instituciones que conforman el Observatorio de Agua advirtieron a los sectores, cuya actividad económica depende directamente del líquido, de la implementación de medidas de racionalización del agua.
Sector agrícola sufre
El sector agrícola será el más afectado. De hecho, ya está siendo perjudicado por la sequía que atraviesa el país.
En este renglón, el uso de agua para riego será restringido, ya que la prioridad la tendrá el consumo humano. “A partir de hoy (ayer) todas las normas que habíamos venido manejando por tandeo van a ser restringidas a un servicio más limitado para riego”, explicó Fernández.
En la región Sur, la presa de Sabaneta y Sabana Yegua están en condiciones extremas. Mientras en el Norte del país, la presa de Tavera-López Angostura y el embalse de Monción están en el mismo estado, detalló el también presidente de la Mesa del Agua.
“Nosotros no podemos permitir que un solo ser humano tenga limitaciones de vida por servir el agua a otro renglón que sabemos es importante pero no determinante para la vida”, refirió el funcionario. Tal como reveló el presidente del Consejo Nacional de Juntas de Regantes, Julio Rodríguez, en la comunidad de Las Matas de Santa Cruz, en Monte Cristi, al Norte de país, la pérdida en plantaciones de cultivos de arroz asciende a un 80%.
Se siente escasez en sectores de la capital
Ciertamente, distintos sectores de la capital desde hace dos semanas empezaron a notar una disminución considerable en la presión de agua que llega a sus llaves. No obstante, también se les ha reducido el tiempo del suministro del líquido. Es decir, que si recibían dos horas de agua, en la actualidad “se las arreglan” con una hora. Sectores como Pantoja, Los Girasoles, Manoguayabo, Herrera, Los Alcarrizos, entre otros, enfrentan la medida de reducción comprando el líquido y utilizando bombas para aprovechar al máximo las horas del suministro.
