‘Plátano Power’ fue la palabra más repetida entre los miles de fanáticos dominicanos que inundaron las butacas del estadio de Miami para presenciar el primer choque de República Dominicana en la primera ronda del este Clásico Mundial de Béisbol.
La algarabía de los dominicanos no se hizo esperar pues a su entrada, todos demostraban con orgullo su nacionalidad. Banderas, pancartas, caras pintadas…Ah y el poderoso plátano, arma principal del equipo dominicano, que también estuvo presente para robarse el show entre los aficionados.
Sí, el singular plátano, fue la pieza presente que destacó por encima de todo. Tampoco faltaron las camisetas con las banderas de la República Dominicana atrás o las sublimes frases como ‘Soy dominicano’, ‘Aquí y en otro lao’, soy dominicano’, ‘Lo ma’ duro de dominicana’.
De distintas partes del mundo, vinieron dominicanos en grupos de familias o de amigos para presenciar uno de los mejores espectáculos del béisbol.
Como el caso del grupo de amigos que vinieron de la República Dominicana, Harold, del kilómetro siete de la Independencia, Luis y Frauny, de la provincia de Salcedo, Tony de Haina, que asisten para ver cada uno de los juegos de la isla caribeña ‘siempre arriba, apoyando la patria’, están orgullosos de ser dominicanos.
No sólo entre amigos se vive este deporte, pues esta pasión de todos los dominicanos también es tradición de familias.
«Le enseño a mi hijo lo que significa ser dominicano, por eso lo traigo al estadio para que sienta lo que es ser dominicano, aquí y en cualquier parte del mundo, apoyando siempre a los nuestros» manifestó Joel Álvarez.
No faltó música en el estadio pues los latinos con sus inconfundibles tamboras, güiras, y ritmo caribeño le pusieron sabor a un evento mundialista que reúne a los mejores peloteros del mundo.
No importo la edad, mayor, adulto, joven o niño, todos gritaban haciéndose sentir desde las infinitas gradas oeste hasta el este y en el corazón del Marlins Park.
‘Tengo 74 años y estar aquí para mí es un momento especial en mi vida, sólo quiero que nos coronemos otra vez’, dijo Manuel Pérez, que se trasladó desde España, junto a su familia para disfrutar de los partidos de la selección dominicana.
Y es que cada jonrón que se produjo anoche hizo palpitar el corazón de cada dominicano que se paraba de sus asientos celebrando sin parar. Así como cada jugada que era aplaudida por los quisqueyanos que dejaron los problemas atrás y se enfrascaron en celebrar por todo lo alto la patria.
‘José, José a José Reyes, ‘Manny Manny’, a Manny Machado o el famoso MVP a Robinson Canó, eran las célebres frases que vociferaban los dominicanos.
