El estilo Country Chic, también conocido por algunos como estilo Cottage, está inspirado en el estilo Country, caracterizado por los diseños tradicionales, los materiales naturales, la calidez y el toque romántico en los detalles textiles y complementos.
Sin embargo, el Country Chic es un estilo más selectivo en lo que a mobiliario se refiere, apostando más por materiales de alto nivel.
Los detalles también diferencian el estilo Country del Country Chic, en este último caso, se presta mayor atención a pequeños detalles y elementos decorativos que, de tratarse del estilo Country, se pasarían por alto.
Lo que realmente convierte al Country Chic en un estilo diferente, especial y encantador, es la combinación de elementos antiguos con otros más modernos. Sin embargo, nada tiene que ver con el estilo Vintage, que también se caracteriza por esta combinación. En este caso, la combinación sólo tiene por objetivo aportar un “toque” acogedor.
A pesar de ser un estilo fácilmente reconocible, por su particular encanto, se trata de un estilo decorativo que permite gran libertad a la hora de decorar cualquier ambiente, pudiendo así, adaptarlo a las necesidades y personalidad de los habitantes de la casa.
Sobre las tonalidades, aquí, el color blanco, de la mano de los tonos pasteles, se convierte en la estrella decorativa e impregna tanto paredes, como muebles y otros accesorios. Lo mismo puedes apostar por colores arriesgados como por tonos neutros, todo será cuestión de gustos y personalidad.
Para lograr este estilo, incluye en la decoración materiales de calidad: apuesta por mobiliario de madera o bambú, incluye cestas de mimbre como elementos decorativos, haz a tus libros partícipes de tu decoración y mezcla mobiliario y elementos nuevos y algo más actual con otros accesorios antiguos o de aspecto viejo.
En los materiales característicos de esta tendencia ornamental se encuentra la porcelana, el hierro y la madera, dando pie a la combinación entre muebles de interior y exterior en ambos lugares.
Aspectos característicos
El mobiliario de este estilo se caracteriza por ser antiguo o por imitar el paso de los años, además se encuentra dotado de la presencia de líneas curvas y terminaciones bien trabajadas.
Existe una gran variedad de técnicas, tales como el craquelado, la pátina o el gastado, que permiten lograr este bonito efecto en todo tipo de muebles.
Complementos
Los textiles
Los tejidos toman un rol muy importante en este estilo decorativo. Volados, ruchados, estampados florales y encajes, son algunas de las características que reúnen estos complementos.
Tanto cortinas, como mantas, cojines y lencería de cama se encuentran impregnados de este bellísimo, antiguo y romántico estilo decorativo. Aunque este estilo se asocia con viviendas grandes y campestres, se puede recrear en una casa o apartamento de ciudad, solo hay que tener un poco de buen gusto e imaginación a la hora de combinar muebles y complementos.
