La Policía Nacional mantiene una estrecha vigilancia en los terrenos de Altos de Brisas del Este, donde ayer se escenificó un violento desalojo que dejó más de 20 personas heridas de perdigones, entre ellas el transportista y diputado Juan Hubieres.
Un destacamento móvil fue instalado en la zona, donde algunos de los afectados tratan de rescatar artículos y mobiliarios que no fueron destruidos, entre ellos blocks y varillas. Mientras tanto, una pala mecánica limpia los terrenos.
Según denunciaron los algunos de los afectados, no abandonarán su lucha hasta que el Gobierno los resarza, debido a que durante el desalojo lo perdieron todo. Afirmaron, además, que todavía en horas de la madrugada la Policía disparaba bombas y perdigones a las personas que se resisten a abandonar el lugar.
