BALANDI, Afganistán (AP).- Un soldado estadounidense salió caminando de su base en el sur de Afganistán la madrugada del domingo y empezó a disparar contra civiles afganos, dijeron testigos y funcionarios afganos y de la OTAN.
Los pobladores de la zona mostraron a un fotógrafo de The Associated Press 15 cadáveres de afganos, entre ellos mujeres y niños, que —dicen— murieron en el ataque perpetrado por el soldado estadounidense.
La agresión aumentará todavía más la tensión entre las fuerzas estadounidenses y los afganos tras semanas de violencia provocadas por la quema de ejemplares del Corán y otros materiales religiosos en una base militar estadounidense. El incidente suscitó ataques y protestas que dejaron unos 30 muertos. Seis soldados estadounidenses murieron en ataques efectuados por sus colegas afganos después que se conoció la quema del Corán.
Funcionarios de la OTAN se disculparon por el ataque del domingo
«Quisiera expresar mi más profundo pesar y consternación por las acciones que aparentemente fueron cometidas por un integrante de la coalición en la provincia de Kandahar», dijo en un comunicado el teniente Adrian Bradshaw, subcomandante de las fuerzas de la Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN) en Afganistán. «Se reporta que uno de nuestros soldados mató e hirió a varios civiles en villas colindantes con su base. No puedo explicar el motivo detrás de actos tan crueles, pero de ninguna manera forman parte de la actividad militar autorizada por la ISAF», siglas de Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad.
El tiroteo sucedió en dos poblados del distrito de Panjwai de la provincia sureña de Kandahar, Alkozai y Balandi, que se encuentran a unos 500 metros (yardas) de una base de Estados Unidos.
Asadulá Jalid, representante del gobierno para el sur de Afganistán e integrante de la delegación de la oficina del gobernador que llegó al lugar para investigar el incidente, dijo que el ataque inició aproximadamente a las 3:00 de la mañana. Agregó que él contó 16 muertos. No se ha logrado conciliar las cifras de muertos.
Un residente de Alkozai dijo a un reportero de The Associated Press haber escuchado los disparos durante la noche pero sólo se enteró de las muertes por la mañana, al hablar con los vecinos, quienes dijeron que el soldado norteamericano entró en sus casas y abrió fuego. El poblador, Abdul Baqi, dijo que no vio los cadáveres pero que habló con las familias de las víctimas.
«Cuando ocurrió, a la mitad de la noche, estábamos dentro de nuestras casas. Oí disparos y después silencio, y nuevamente disparos», agregó Baqi.
