San Juan, Puerto Rico. La Serie de Béisbol del Caribe, edición 62 y que culminó anoche, fue “colmada” con un éxito resonante, pese a que no tuvo estelares peloteros del exigente béisbol de las Grandes Ligas.
Es lo que aprecian analistas beisboleros al tiempo de exponer que “todo ha sido brillante, con jugadores que quieren escalar grandes peldaños, pero también con la participación de veteranos que todavía no quieren que los manden al retiro”. Carlos Baerga, exsegunda base de las Grandes Ligas y quien exhibió dotes de buen pelotero, le dijo a elCaribe que está sorprendido con lo que ha visto en el terreno de juego del clásico caribeño que tiene como escenario el viejo Estadio Hiram Bithorn de San Juan.
Baerga, quien formó parte del llamado “Dream Team” de Puerto Rico, en la Serie del Caribe de 1995, celebrada en esta isla y que ganó invicto la corona, cree que con los peloteros que conforman los seis conjuntos “esta Serie del Caribe han sido un gran éxito”.
Precisamente el periódico El Nuevo Día (el rotativo más importante de Puerto Rico), en su edición de ayer, resaltó la calidad del certamen caribeño San Juan 2020, “a pesar de no contar con estrellas de Grandes Ligas”. El diario hace hincapié en lo que se vivió el pasado miércoles cuando jugaron las novenas de República Dominicana y de Puerto Rico y que fue visto por casi 20,000 fanático. El Nuevo Día, en su sección deportiva, precisa: “No hicieron falta estrellas de las Grandes Ligas para que el partido del miércoles de la Serie del Caribe entre los Cangrejeros de Santurce y Toros del Este” y atrajo 19,120 fanáticos que pagaron su entrada.
Jordany Valdespín, Rubén Sosa, Wilkin Castillo y Junior Lake, cuatro pilares del equipo dominicano, figuran entre los peloteros que participan en la Serie del Caribe 2020 que no trabajan en las Grandes Ligas. Los citados, en todos los partidos del seleccionado quisqueyano, han puesto su vergüenza profesional al servicio de la causa de la pelota dominicana.
