El talento de los Gigantes del Cibao y los Medias Blancas de Chicago se despidió como dueño de la Triple Corona del bateoCuando se escuchó el nombre de Eloy Arturo Jiménez, muchos imaginaron que sería de gran ayuda para los Gigantes del Cibao, pero pocos pronosticaron que en este béisbol invernal dominicano dejaría tan gratos recuerdos de sus habilidades y su prodigioso poder.
Sólo hizo tocar el diamante del estadio Julián Javier, el día inaugural, el 14 de octubre para debutar a lo grande con un jonrón, sencillo y tres remolcadas. Desde ese momento, el prospecto número uno en la organización de los Medias Blancas de Chicago dejó claro que daría agua a beber en esta pelota invernal.
A pesar de que jugó su último partido en esta justa invernal el pasado miércoles ante los Toros del Este, así lo confirmó Ismael Cruz, gerente general de los Gigantes del Cibao a este medio, que recibió una notificación por parte de la organización de los Medias Blancas. Eloy, se despidió como líder en promedio (.368), remolcadas (21) y cuadrangulares (4), dueño de la triple corona ofensiva en Lidom, hazañas que colocan su nombre como una estrella en ascenso. “He visto pocos jugadores con las cualidades que tiene, sus habilidades. Es impresionante su poder, y no sólo eso, su humildad fuera y dentro del terreno, su manera de trabajar. Novato del Año o Jugador Más Valioso, pudo ganar ambos, fue un gran privilegio tenerlo en nuestra alineación”, expresó el gerente Ismael Cruz a elCaribe.
El niño prodigio de Chicago fue una fuerza dominante en la Liga Invernal Dominicana, que causó estragos a muchos lanzadores veteranos y novatos que aún están accionando en estos predios invernales. Contra los zurdos, bateó .545, con cinco impulsadas, un bambinazo, además de tres dobles. Ante los derechos, promedió .333, con 16 remolcadas, tres jonrones, dos dobles y dos triples, un verdadero azote. Y ni hablar de corredores en posición anotadora, donde dejó un amigable .459 de promedio ante sus contrarios.
Según su reporte, Jiménez, bateador derecho, genera impresionante velocidad con su bate y hace un buen trabajo al usar todo el campo y hacer ajustes, rápidamente. Él lo tiene todo, jugador de cinco herramientas y una defensa por encima del promedio.
Tras lo demostrado en esta liga y lo que desplegó en Ligas Menores, la pasada campaña, Jiménez tiene el carril de adentro para impresionar y ganarse una asignación a Triple A o simplemente dar la sorpresa e iniciar el día inaugural con Medias Blancas, equipo que lo obtuvo vía cambio con los Cachorros de Chicago a mitad de este año. “Irá a los entrenamientos con las expectativas de que va a formar parte de nuestro equipo, lo cual es grandioso”, dijo Rick Hahn, gerente general de los Medias Blancas a medios internacionales durante las Reuniones de Gerentes generales de Grandes Ligas, en Orlando. La personalidad de Eloy, su ética laboral y su inteligencia realmente ha superado lo que habíamos visto en el papel desarrollado por nuestros escuchas”. Nativo de Villa Francisca, Jiménez despertó miradas en esta justa invernal, considerada por muchos, la más difícil después de Grandes Ligas y evocó recuerdos de cuando Gregory Polanco aterrizó y en una misma temporada (2013-2014) se convirtió en Jugador Más Valioso y Novato del Año con promedio de .331, cinco cuadrangulares y 28 impulsadas en 44 partidos.
Tal vez, faltó apreciar más del talento en este torneo invernal, pero todo el que fue a los estadios a verlo jugar, no puede negar que a su corta edad, posee el material para convertirse en un jugador de todos los días, en Las Mayores.
Y como si fuese poco, ni el peso de 205 libras, ni su estatura de 6’5 empañan el buen comportamiento y disciplina, además del liderazgo que inspira Eloy, quien fue educado bajo un entorno familiar, con padres profesionales, su progenitor, profesor de educación física y su madre, bioanalista de la Policía Nacional.
