A solo once días para el 24 de agosto, fecha en la que el Consejo Nacional de Educación pautó el inicio del nuevo año escolar 2020-2021, reina la indefinición entre la comunidad educativa que aún espera la decisión de las nuevas autoridades en torno a la fecha y la modalidad que se habrá de implementar para abrir las clases en plena expansión de la pandemia de COVID-19.

Hace 25 días que el ministro de Educación designado, Roberto Fulcar, prometió al país anunciar un conjunto de medidas en ese sentido, sin embargo, todo indica que habrá que esperar que asuma formalmente la dirección de la cartera, el próximo domingo 16 de agosto, para conocer el contenido del plan.

“La decisión va a ser, en todo caso, el resultado de lo que aconsejen las circunstancias del país, de lo que diga la ciencia, de lo que digan los médicos y de lo que diga la responsabilidad social. Nosotros vamos a tomar la decisión que corresponda en el momento oportuno y la informaremos por las vías correspondientes”, dijo Fulcar en ese momento a los periodistas.

En el ínterin, las distintas federaciones y asociaciones de colegios han estado presionando para que el periodo escolar inicie en la fecha acordada bajo la modalidad virtual y preservando los costos regulares de colegiatura.

Esta incertidumbre prolongada en el tiempo ha provocado que muchas familias hayan postergado la inscripción de sus hijos, especialmente en los centros educativos privados, muchos de los cuales, solo tienen inscritos el 50 por ciento de la matrícula.

Colegio Loyola comenzará virtual

Mientras tanto, prestigiosos colegios como el Loyola, están determinados a comenzar la docencia al margen de la decisión del ente rector.

En un comunicado de fecha 12 de agosto, al que tuvo acceso elCaribe, el Colegio Loyola informó a los padres y madres que el año escolar iniciará el 24 de agosto, y que, por lo tanto, deben honrar los compromisos económicos contraídos, comenzando con el pago de la primera de las diez cuotas, este mes.

“Algunas familias han manifestado que están esperando cambios. No los habrá. El Colegio Loyola inicia su año escolar el 24 de agosto. Otras familias han solicitado que se le envíe el contrato, no lo haremos. En este momento tenemos 700 familias con el proceso financiero completado, de las cuales, 130 no han venido a firmar. A las que están incumpliendo les comunico que no pararemos nuestra gestión por respeto a los que ya cumplieron, les invitamos a asumir el proceso con responsabilidad”, dice la nota informativa 001/2020, firmada por su rector, el padre Jorge William Hernández.

En su comunicado, advierte que las familias que no firmen el contrato no se les dará entrada al sistema educativo online de sus hijos, “así que ellos no recibirán las informaciones que a partir, de mañana jueves 13, remitiremos a través de los perfiles de los estudiantes y por los correos electrónicos de los padres”.

¿Se aplaza o se virtualiza?

Por su parte, la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), que inicialmente defendía la implementación de un modelo híbrido, recomendó a Fulcar, que la educación sea totalmente a distancia, incorporando una programación en radio y la televisión. Mientras que, personalidades como el maestro de la medicina, José Joaquín Puello y el padre Manuel Ruiz, plantean posponer el inicio del año escolar a enero hasta lograr un control de los indicadores sanitarios.

Fuerza del Pueblo pide debates y bonos internet

La Fuerza del Pueblo (FP) urgió a las autoridades educativas a implementar una mesa consultiva interinstitucional escuchar las autoridades sanitarias, la ADP, las familias, los gremios de la salud y las asociaciones de colegios antes de tomar una decisión al respecto. La secretaría de Educación de la FP y ex ministra de Educación, Josefina Pimentel, abogó por crear un programa de ayuda que supla de bonos de internet a las familias pobres para reducir la brecha digital y por lo tanto la efectividad de la docencia.

Educa cree aumentaría deserción si aplazan clases

Acción Empresarial para la Educación (Educa), por su parte, defiende la continuidad del año escolar en el tiempo y fecha establecido, con una estrategia flexible adaptada a la realidad epidemiológica de cada provincia, alegando que no hacerlo implica un alto riesgo de agudizar la deserción y ahondar las diferencias sociales. Ayer, la corriente magisterial Narciso González, que dirige la seccional de la ADP en Santiago sugirió que las clases inicien en enero y que en el período agosto-diciembre se monte la logística para ese fin.

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