La era dominante del Partido de la Liberación Dominicana llega a su fin mañana cuando Luis Abinader asuma como presidente y el Congreso se controlado por el Partido Revolucionario Moderno (PRM).
El PLD gobernó al país 20 de los últimos 24 años, con excepción del período 2000-2004. El primer triunfo fue en 1996, cuando Leonel Fernández venció a José Francisco Peña Gómez, del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), en una segunda vuelta con el apoyo de Joaquín Balaguer. Fue interrumpido en el 2000, con la victoria de Hipólito Mejía (PRD) sobre Danilo Medina.
Leonel regresó en el 2004 al vencer en primera vuelta a Mejía y se reeligió en 2008 al superar a Miguel Vargas, ambos del PRD.
Luego llegó la era de Danilo Medina, quien venció a Mejía en el 2012 (PRD) y a Abinader en el 2016 (PRM), también en primera vuelta.
Esa cadena de victoria llevó al entonces presidente del partido, Leonel Fernández, a vaticinar que el PLD “es una fábrica de presidente y gobernará hasta el 2036”.
Sin embargo, intentos del presidente Danilo Medina de modificar nuevamente la Constitución en el 2019 comenzaron a “cavar” la tumba de la organización. Leonel, quien apoyó la reforma constitucional en el 2015, se plantó y encabezó marchas al Congreso Nacional para oponerse. Luego Danilo desistió, por presiones nacionales e internacionales.
Luego, tras la aprobación de la Ley de Partidos en el Congreso dominado por el PLD, llegaron más disputas. El PLD organizó unas primarias abiertas que fueron cuestionadas por el uso del voto electrónico.
Leonel se presentó ante Gonzalo Castillo, escogido en una encuesta entre más aspirantes, y perdió. El expresidente denunció un “fraude colosal” y a la postré abandonó el partido para fundar la Fuerza del Pueblo, que lo llevó como candidato en los pasados comicios de julio.
La partida de Leonel, junto a otros altos dirigentes, melló la candidatura de Gonzalo, quien fue definido como un “títere” de Danilo.
Abinader y el PRM aprovecharon la crisis en el PLD y salieron victoriosos en las elecciones municipales de marzo, que habían sido aplazadas debido a un fallo con el voto electrónico, que motivó la dimisión de miembros del equipo de cómputos de la Junta Central Electoral (JCE). En julio, Abinader venció en primera vuelta y el PRM arrasó en los comicios congresuales, torneo que debió efectuarse en mayo, pero que debido a la pandemia del coronavirus fueron aplazados para el 5 de julio.
16 años seguidos de dominio en el Congreso Nacional
Pero no solo fue la hegemonía presidencial del PLD que llegó a su fin. La agrupación fue derrotada de manera “aplastante” en los comicios municipales de marzo y en los congresuales de julio. Fueron 14 años seguidos como la máxima fuerza congresual en el Senado y la Cámara de Diputados.
A partir de las elecciones del año 2006, durante la segunda presidencia de Leonel, el PLD inició un período de dominancia política casi absoluta en República Dominicana, con un triunfo en las municipales y congresuales de ese año que les permitió tener todo el poder político en sus manos. Ahí comenzaron 14 años seguidos de control en el Congreso Nacional.
Ese año el PLD obtuvo el 52.4% de los votos, lo que se tradujo en 22 senadurías y 96 diputaciones, más del triple y doble, respectivamente, de lo que lograron los partidos de oposición. El PLD venció a la llamada “Alianza Rosada”, formada por el PRD y el Partido Reformista Social Cristiano.
Para el próximo cuatrienio, esas cifras aumentaron hasta lograr conseguir 31 de las 32 plazas de la Cámara Alta, acompañado de un total de 105 diputados, para controlar el 63 por ciento de los asientos del Congreso Nacional. Lo nunca visto en la historia política del país.
Para los comicios del año 2016, el PLD volvió a triunfar en las urnas. Lo hizo con Danilo Medina como candidato presidencial, con un histórico 61% de los votos, y obteniendo 28 senadores de las 32 plazas disponibles.
Los morados perdieron el control de la Cámara de Diputados al dividirse su partido y al crearse Fuerza del Pueblo, del expresidente Leonel Fernández.
Esa división política también les llevó a caer derrotados en los comicios municipales del pasado mes de marzo. El PLD obtuvo 67 alcaldías, cuando en las elecciones de 2016 se alzó con 107. El PRM ganó 80 posiciones municipales, cuando solo tenía 3 que había ganado cuatro años antes. En marzo, en las elecciones municipales, el Partido PRM obtuvo 1,432,414 votos en alcaldías y 294,839 en distritos municipales para un total de 1,727,553 y un 40.76% y de esa manera, pasó a liderar el número de alcaldías con 81 mientras que el PLD alcanzó 65. El PLD logró 1,129,807 votos en alcaldías y 296,591 en distritos municipales para un total de 1,426,398 y un 33.66%.