El «lead» que corresponde al presente trabajo viene a cuentas porque el legendario peleador filipino, con privilegiado registro de 62 victorias, ocho derrotas, dos empates y 39 nocaut, todavía no se decide a ofrecer -de manera oficial y definitiva- la noticia que muchos esperan -incluidos sus fervientes simpatizantes-: El anuncio de su retiro de los cuadriláteros mundiales.
El pasado 21 de agosto, en combate celebrado en el coliseo T-Mobile de Las Vegas, Estado de Nevada (Estados Unidos), Pacquiao fue soprendido al caer derrotado por el cubano Yordanys Ugás quien revalidó su corona welter avalada por la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Ugás, quien estaba abajo en las apuestas (4-1) y también dado como no favorito por los expertos, logró vencer al sensacional púgil filipino que ha sido monarca del mundo en ocho categorías diferentes -desde la del peso mosca y la que corresponde al superwelter.
Pacquiao es el único boxeador ha ganado ocho cinturones mundiales en otras tantas divisiones que lo ha hecho en la maravillosa historia del apasionante deporte.
Pero, ¿cuándo dará la noticia esperada?
Los expertos, que no esconden opinar de manera firme, creen que Pacquiao «ya nada tiene que demostrar en su exitosa carrera como boxeador profesional».
Por lo tanto, precisan, debe colgar los guantes y decirle adiós al deporte que tanta gloria le ha dado y lo ha catapultado como seguro miembro del Salón de la Fama de Canastota, casa donde figuran los inmortales del boxeo profesional.
Sin embargo, otros analistas, al ver el silencio de Pacquiao tras su inesperada derrota ante Ugas, dicen que «al parecer el filipino no quiere colgar los guantes con un fracaso tan amargo».
En caso de que el legendario peleador de las Filipinas declare que seguirá en los cuadriláteros, «de seguro» que le solicitará a Ugás que le dé la revancha.
Si así ocurre, entonces un segundo combate podría montarse de nuevo en la ciudad de Las Vegas con una nueva paga respetable bolsa Pacquiao que rondaría los 25 millones de dólares en tanto que el cubano podría devengar al menos unos cinco o seis millones.
