Santiago. El obispo de la Diócesis Mao-Montecristi, monseñor Diómedes Espinal consideró que la delincuencia se le ha escapado de las manos a las autoridades, y la comparó con una plaga de gusanos “sin insecticida que la pueda controlar”.
“Sabemos que es el pan nuestro de cada día uno oír los casos de violencia, de asaltos, de robos, de muertes, homicidios, femenicidios, una realidad que nos toca vivir, que uno muchas veces lo oye en las noticias y como que nos estamos acostumbrando a eso, pero cuando toca una persona amiga, familia, entonces uno como que entiende más la realidad”, precisó el también presidente de la de la Conferencia del Episcopado Dominicano previo a la misa por el novenario de Domingo Bretón Martínez, hermano de monseñor Freddy Bretón, asesinado durante un asalto la pasada semana para robarle su motor.
Dijo que el país está como una plantación de yuca, lleno de gusanos que lo destruyen y que no hay un insecticida que lo puede controlar, aunque aclaró que este un país tan bello, de gente buena, de tantas cosas que se hacen y que significan progreso, pero por otro lado están todos esos males que son como una plaga que no hay manera de controlar.
Por un país de paz
“Esto ha escapado ya a las autoridades que tienen que ver, pero mantenemos la fe en Dios, la esperanza de que un día podremos tener el país que queremos, el país que soñamos, y ojalá que todas las instituciones, empezando por la familia que es la primera institución, pues trabajemos en ver cómo podemos ir dando un rostro nuevo a la familia, a la sociedad, para que podamos vivir en paz, que sea una paz fruto de un esfuerzo de todos”, expresó monseñor Espinal. Dijo que “para combatir la delincuencia se debe dar oportunidades de educación y trabajo a los jóvenes, y que la justicia sea un poco más recta en sus asuntos, que no se queden solo en lo que dice la ley”.
Al ser cuestionado sobre la medida de cambiar las autoridades donde se dan hechos delictivos, Espinal dijo que la fiebre no está en la sábana y que no es asunto de cambio, porque si hay una autoridad que no funciona en un lugar y lo mandan a otro lugar, va a continuar con su misma forma de actuar. “O sea que no es asunto de cambiar, es asunto de tomar conciencia todos, que todos los que tenemos alguna responsabilidad, alguna función sea en lo que sea, en la parte religiosa, política, civil, militar, en la educación asumamos la responsabilidad que nos toca”, acotó, para finalizar con el pedido de justicia en caso del hermano de monseñor Bretón.
La sociedad y la familia esperan se haga justicia
A la misa del novenario de Domingo Bretón Martínez, efectuada enla parroquia Sagrado Corazón de Jesús de Licey al Medio, asistieron monseñor Francisco Ozoria, arzobispo de Santo Domingo, monseñor Julio César Corniel, obispo de Puerto Plata y monseñor Agripino Núñez Collado, entre otros sacerdotes, diáconos. Monseñor Freddy Bretón, al oficiar la misa en honor a su hermano, agradeció el respaldo recibido en estos días de dolor.
