Chino Méndez es uno de los fundadores del Grupo Bonyé y creador de clubes de dominó

Antes de enamorarse de la locución y producción de radio, Chino Méndez en su niñez y adolescencia se desempeñó como mecanógrafo en la Asociación de Detallistas, donde comenzó llevando comida a los empleados a la edad de 8 años.

Con el pasar de los años, Méndez trabajó como promotor en Brugal y Compañía y en la Cervecería Nacional Dominicana, donde fue el propulsor de los famosos “club de dominó” y de los llamados “colmadones”. También es uno de los fundadores del Grupo Bonyé, pasión que junto a su faceta de locutor y productor desarrolla desde hace décadas.

  1. De Faría a Gualey
    Nací en Faría, en el Ensanche Luperón, de ese barrio salieron Los Mina nuevo y Gualey. A nosotros nos desalojaron para hacer la urbanización Doña Julia, nombre de la madre del tirano Trujillo, era para la clase media alta. De Faría nos mudamos a Gualey, pero mi mamá quiso quedarse con una casa en el Ensanche Luperón. Como mi papá era maestro constructor, lo suyo era trabajar lo comido por lo servido, en una semana él se ganaba la misma cantidad de dinero que el ingeniero de la obra. Estando pequeño mi papá enfermó y ahí se acabó el dinero, entonces me hice adulto a poca edad, pues tuve que empezar a trabajar. Comencé llevando comida a la Asociación de Detallistas que quedaba en la Jacinto de la Concha 49, para entonces tenía 8 años. Recuerdo que veía al mayordomo de la asociación escribiendo en una máquina con solo dos dedos, un día, ya con 10 años intenté hacerlo, pero él me dijo que me comprara un método, entonces me fui a la Duarte con Barahona, compré uno y aprendí a darle a la máquina. Ya con 12 años era mecanógrafo de la asociación gracias a los consejos de ese señor. Para conseguir el título me fui a Radio Televisión Dominicana que daban el curso y a los 14 años me dieron el título de mecanógrafo”.
  2. Sus estudios
    Llegué a la primaria alfabetizado, mi mamá como era profesora nos alfabetizaba antes de soltarnos. Mi primera escuela fue la República de Haití en el Ensanche Luperón, pero llegó la Revolución y me puso en un colegio adventista en la Peña Batlle, esquina María Montés hasta quinto curso. Volví a la escuela Haití para hacer el sexto y el séptimo, pero el octavo fue en el Juan Pablo Duarte. Como necesitaba la mañana para trabajar, mi mamá me inscribió en la Rodríguez Objio que por la mañana era de señoritas y mixto en la tarde. Ahí fue que se estrenó el método Braille para personas no videntes, ellos eran súper inteligentes. Mis estudios universitarios los realicé en la universidad de la vida”.
  3. Gremialista
    En el Juan Pablo Duarte pertenecía al Comité Queremos Clases, incluso en el Objío fui quien lo creó. Cuando había movilizaciones, éramos los primeros que estábamos al frente. Una vez Hatuey quería movilizar el Juan Pablo Duarte y lo enfrentamos, ese día no se lo permitimos, ellos por cualquier cosa querían movilizar el liceo, les expliqué que nosotros teníamos todo eso organizado. En el Juan Pablo Duarte me gradué de bachiller, y luego me gradué en la universidad de la vida. También recuerdo que con 14 años le pasaba armas a los guerrilleros, lo hice en tres ocasiones, ellos mismos me decían en qué casa las tenían enclavadas. Las pasaba en los locrios, las envolvíamos en plástico, poníamos una capa de locrio, luego el arma y arriba mucho aguacate y fritos maduros”.
  4. Músico a corta edad
    Me hice músico también siendo niño. Conocí a Wilfrido Vargas en una velada en Altamira, Puerto Plata, nos llevó un familiar de él que era síndico, yo tenía 14 años. Estábamos los hermanos Peláez, Andy Mesa y yo. Cuando llegamos con el grupo nos estaba esperando Wilfrido con la trompeta, un hermano en la guitarra, su querida madre con la flauta, su padrastro con un acordeón, entonces llegamos nosotros con tumbadora, timbal, cencerro y tocamos. Al año siguiente tocamos tres veladas en Altamira a casa llena, eso nunca se me olvida. Para la época mi hermana estaba casada con el maestro Soni Ovalle, ya fallecido. Recuerdo que a la casa iban muchos músicos, entre ellos Johnny Ventura, él decía que yo había nacido de la pata de los caballos. En el Ensanche Luperón habíamos formado un grupito que se llamaba Los Salaitos de Johnny Ventura y bailábamos en el canal 4”.
  5. Llegada de Wilfrido a la capital
    Al año siguiente de haber tocado en Altamira, Wilfrido vino a hacer el bachillerato a la capital y me fue a visitar al Ensanche Luperón. Ahí fue que formamos el grupito Los Juveniles del Ritmo, estaban los hermanos Peláez, Ricardo, un muchacho inteligente que tocaba guitarra, uno llamado Duarte Rafael que ya murió, Choco y Bilín Lockward, este último murió. También un muchacho que le decíamos Chípalo, de él nunca más volví a saber, tocaba acordeón. El grupo duró un buen tiempecito largo. Cuando Wilfrido entró a la universidad conoció a Víctor Víctor, Sonia Silvestre y formó un grupo con ellos, pero luego me dijo que eso no era lo de él, que tenía que hacer dinero para traer a su mamá y así mismo fue. Cuando Wilfrido le buscó la primera casa fue en la Calle 30, esquina Diagonal Segunda, parte atrás. Recuerdo que yo tenía unos ahorros en el Cerito de Oro, creo que eran 40 pesos, unos cuartos en ese tiempo, retiré como 15 que les faltaban a Wilfrido para completar el depósito y ahí Wilfrido arrancó. Después me convertí en colaborador de Rafael Corporán de los Santos”.
  6. Fiel colaborador
    Me hice fiel colaborador de Corporán, él confiaba mucho en mí, me daba las sociedades en los clubes donde se iban hacer fiestas. Luego, gracias a él me hice locutor en el Otto Rivera en 1977, pero nunca fui a buscar el carnet, porque en 1978 Balaguer solo se le entregaba al que iba hablar mal del nuevo gobierno que iba a encabezar don Antonio Guzmán. Después, los enviaron a suspender. Ahí mismo entré a trabajar en Brugal & Compañía, me llevó Corporán. Cuando llegamos a la oficina de don George Arzeno, a la sazón presidente de la empresa, lo primero que le dijo fue mira el fenómeno que te traje. Como en ese tiempo se utilizaba un libro de ruta, don George me preguntaba dónde quedaban las calles, y yo les iba diciendo porque me las sabía todas, me las aprendí cuando era tarjetero en la Asociación de Detallistas. Entré a trabajar en Brugal muy jovencito como promotor, me dieron una ruta”.
  7. Clubes de dominó
    En Brugal formé los famosos clubes de dominó en los barrios, los roneros se mataban en los negocios, expliqué en la empresa que la gente estaba en los callejones bebiendo romo y jugando dominó, entonces me hice socio de la Asociación de Dominó. En mi plan de ruta nunca se me olvida el primer levantamiento que hice, fui a 14 clubes y puse cinco establecidos. Cuando llegaba a un sitio y estaban jugando dominó les sugería hacer un club, patrocinábamos una casa o un cuartico que pagaba 10 y 20 pesos, a mí me daban una cantidad de ron para colaborar con esos colmados. Recuerdo que llegué a formar alrededor de 40 clubes y de ahí salió un programa llamado Dominó Deportivo en RPQ Cadena Azul de 7 de la mañana a 8 de la noche. Ahí no solo hablábamos de dominó, sino también de boxeo y de béisbol, llevaba a Julito un compañero inteligentísimo. A través de esos clubes narré una partida de dominó en Teleinde Canal 13 cuando era de Semorili, el papá de los Pérez, Eugenio y William en un programa llamado Solo para Hombres con Lilín Díaz y Billy Berroa, iba una vez a la semana hablar de dominó y de los clubes. Después me promovieron como encargado de zona, después asistente del relacionador público que era Newton Rodríguez. En 1976 salí de Brugal porque fui exitoso como productor de radio”.
  8. Los famosos colmadones
    En 1978 fue la famosa línea 3 de Cervecería, la presidente vendiéndose mucho, pero se les presentó un problema de logística y Corporán vuelve y me busca, me dice que el señor Menicucci quería hablar conmigo, que había que mandar unas invitaciones, entonces él les dijo que resolverían conmigo, que yo sabía todas las direcciones de los comerciantes. Recuerdo que con tres mensajeros entregué todas las invitaciones y fui parte de la logística de esa inauguración. Ahí mismo, acordaron dejarme nominal por seis meses. En Cervecería fui el primer promotor nombrado en sus 50 años, trabajé con Papito Guerra, el nombre de colmadón es mío, fue inspirado en el colmado La Venganza. En la Josefa Brea con Eusebio Manzueta, siendo yo un vendedor prestado a esa ruta formé allí el primer colmadón, pero siempre decía que quería implementar uno en mi ruta y así lo hice. Cuando volví a mi ruta original en Villa Duarte, Ensanche Ozama y Los Mina formé uno en la Marcos Rosario 107, eso bastó para que Cervecería me diera un presupuesto para eso”.
  9. Sus padres
    Mi madre, Ana Graciela Vargas era educadora, le decían Chela. Ella impartía clases en la escuela República de Haití y en el Liceo Juan Pablo Duarte por la tarde. En la Miguel Ángel Garrido por la noche. Ella fue una educadora fuera de serie, enseñaba el idioma español a los chinos, se hizo especialista en eso, tenía conocimiento del mandarían. Le gustaba mucho la cultura china, a tal punto que me puso Chino de apodo porque nací un 10 de octubre Día de la Independencia China. Mamá también era muy jocosa, muy agradable, fue la primera que se graduó de Idiomas en la UASD. Mi papá Generoso Enrique Méndez le gustaba mucho la música, en eso nos parecemos, también le gustaba bailar, era muy responsable con sus mujeres y con sus hijos. Duró 14 años con una parálisis, mi mamá fue la que nos echó para adelante y mis dos hermanos mayores que ya murieron. Mi papá compraba muchos discos, los escuchaba y los coleccionaba, cuando falleció me dejó más de mil ejemplares, tenía hasta música clásica, entonces puse una tienda a la que le he sacado buen resultado”.
  10. Grupo Bonyé
    El grupo Bonyé surgió en 2008, ya cumple 14 años. Desde Los Juveniles del Ritmo iniciamos tocando encima de la música, buscaba aumentar mis clientes y hacer cosas para que se vendiera cerveza en Villa Consuelo en un negocio que a mi papá le gustaba y en el que me sentía bien. Cuando hicimos el primer colmadón con el grupo fue que lo inauguramos. El grupo de amigos nos juntábamos a tocar en el Sartén y un día nos invitaron a un cumpleaños en el Rinconcito de don Guillermo, tocamos Félix Báez, Néstor Sánchez, Roberto Bobadilla, Franklin Soto y un servidor acompañados de diez músicos más. A las cuatro semanas busqué unos músicos en Villa Mella que necesitaban trabajo y comenzamos a tocar en vivo y buscamos al director musical Aníbal Bravo. Del Rinconcito de don Guillermo nos trasladamos al frente de Las Ruinas de San Francisco y ahí nace el Grupo Bonyé. En la actualidad tocamos muchas bodas y cumpleaños”.

Vida familiar

Más de 50 años de matrimonio

“Mi esposa María Francisca Peralta y yo nos casamos un 9 de octubre de 1972, yo estaba por cumplir 18 años y ella 15. Tengo cinco hijos, tres con ella y dos de otras relaciones. Recuerdo que conocí a mi esposa cuando iba a ayudar con las matemáticas a una compañera del Juan Pablo Duarte. Nunca se me olvida el día que ella pasó a saludarla, se veía bonita, delgadita, con unas piernas lindísimas, entonces me dije de esta es que me voy a enamorar. Además, en lo que ayudaba a mi amiga con las matemáticas, aprovechaba para estudiar de los libros que no podía comprar, me los embotellaba. Un día la veo abrazada de un hombre muy joven, yo estaba con unos amigos bebiendo cerveza en una barrita que quedaba frente a su casa. Cuando vi a ese hombre que la abrazaba y ella me miraba se reía, pensé que era su novio y me di tremendo jumo, el único que me he dado en mi vida. Pero después supe que él era su papá. Actualmente mi esposa y yo estamos por cumplir 51 años juntos y ya nos casamos por la iglesia”.

Chino Méndez

Autoría
Soy el creador de los colmadones en los barrios y de los clubes de dominó, lo conformé cuando trabajaba en Cervecería y en Brugal”.

Colaboración
Con 14 años, pasé armas a los guerrilleros, las envolvíamos en plástico, poníamos una capa de locrio y arriba mucho aguacate”.

Recopilación
Mi papá compraba discos, los coleccionaba, cuando falleció me dejó más de mil ejemplares, puse una tienda y le he sacado buen resultado”.

Recopilación
Mi papá compraba discos, los coleccionaba, cuando falleció me dejó más de mil ejemplares, puse una tienda y le he sacado buen resultado”.

Llegué a la primaria alfabetizado, mi mamá como era profesora nos alfabetizaba antes de soltarnos. Mi primera escuela fue la República de Haití en el Ensanche Luperón.

Chino Méndez, locutor y productor de radio

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