Para la psicóloga Laura Troncoso los juguetes deben ser elegidos y usados indistintamente por niños y niñas
“Los niños no juegan con muñecas” es una expresión que en algún momento de la vida hemos escuchado por parte de algún adulto que le inquieta ver, por ejemplo, a los varones jugar o realizar actividades que entienden como exclusivas de las niñas o mujeres. También se puede dar el caso de que se repita la frase “las niñas no juegan con camiones”, pero es una oración que se escucha menos frecuente, entre los adultos. En realidad, los juguetes no tienen sexo, por lo que tampoco tienen el rol de sacar a flote o desarrollar la identidad de género, ya sea femenino o masculino, de una persona, aseguró a elCaribe la psicóloga clínica, psicopedagoga y terapeuta infanto juvenil, Laura Troncoso.
“Si se fijan en los empaques o cajas de los juguetes, no hablan de niñas o niños, sino que las especificaciones son generales e inclusivas”, indicó la especialista que tiene consulta en el Centro Vida y Familia.
¿Es correcto que los padres o tutores inculquen a los infantes sobre que “las niñas juegan con muñecas y los niños con carritos”?
Creo que no se trata de ver si es o no correcto, sino de reconocer esta dinámica como un constructo social y cultural, por lo que desde mi punto de vista son los adultos quienes le han otorgado un género a los juguetes, cuando estos deberían ser elegidos y usados indistintamente por niños y niñas.
¿Cuáles son los juguetes ideales para regalar y dónde radica su importancia?
La elección de los juguetes va a depender de la edad del niño o niña que recibirá el regalo, el presupuesto que se tenga, los intereses y, si se espera lograr algún objetivo con este. Por tanto, el mejor juguete será aquel que pueda cumplir con las expectativas que nos hemos creado al elegirlo. Por ejemplo, una niña de 7 años a la que le gustan mucho las LOL (muñecas que están de moda actualmente), probablemente se sentirá feliz si recibe algún obsequio relacionado, ya sea un juguete, útiles o prenda de vestir de LOL. Dentro de los beneficios de los juguetes figuran la estimulación de habilidades sociales e interactivas. A nivel psicopedagógico, permiten desarrollar habilidades tanto motoras como cognitivas, las cuales también estimulan su creatividad y ayudan en su proceso de enseñanza aprendizaje.
¿Existen juguetes perjudiciales para los niños?
Desde mi punto de vista, los juguetes como tal no son perjudiciales para los niños, sino el mal uso o, en el caso de los electrónicos, exposición a estos por un tiempo excesivo; no todos los juegos y juguetes son apropiados para todas las edades, por lo que es muy importante considerar a quienes va dirigido y si se tiene la madurez necesaria para utilizarlos. En adición, un aspecto a considerar es que los niños deben ser supervisados siempre por un adulto, que vele por su seguridad y su bienestar; es decir, no se trata de darle un juguete y dejarlo solo por un tiempo ilimitado.
¿Qué tiempo deben dedicar los niños al juego (cómo debe ser la dinámica)?
El tiempo que se dedica al juego puede ser variable, porque por lo general se ve asociado con la rutina de los niños; durante las vacaciones este suele ser mucho mayor, debido a que se tiene mucho tiempo libre, contrario a cuando están asistiendo al colegio donde siguen un horario más riguroso. El juego, per se, no es perjudicial sino cómo se haga y si es apropiado para la edad y nivel madurativo de los niños.
Para cada edad, ¿qué actividades y juguetes recomienda?
Un truco que suelo dar a los padres o adultos que me lo solicitan, es verificar en los empaques las edades recomendadas de cada juguete.
Para los más pequeños, menores de 2 años, los juguetes suelen ser muy lúdicos para estimular su motricidad y lenguaje oral; entonces pudieran ser teléfonos con sonidos, sonajeros para niños, juegos educativos con figuras, entre otros.
A partir de los 2 años, los bloques y los rompecabezas son buena opción, además de juegos que fomenten la interacción y los roles, bicicletas o triciclos.
Luego de los 5 años, los niños suelen expresar de alguna forma sus gustos y estos deben ser considerados a su capacidad y edad, y sobre todo si es factible. En estas edades, son recomendados los juegos de mesa y de turnos, para fomentar la interacción social, la espera y el respeto por los derechos de otros.
