Para disfrutar de este asueto, sobre todo si sales de la ciudad, el Ministerio de Salud Pública y los especialistas médicos recomiendan a la población contar con un botiquín de primeros auxilios con productos básicos para el cuidado de la salud.
Por lo general, cuando se habla de vacaciones, inmediatamente se piensa en mar, sol, playa, río, en el vestuario adecuado para la ocasión y, por supuesto, en descanso y diversión. Sin embargo, a muchos se les escapa echar en la maleta un botiquín con los medicamentos y artículos necesarios para enfrentar cualquier percance de salud.
Las insolaciones, quemaduras de la piel, reacciones alérgicas a plantas e insectos y molestias estomacales son los malestares más comunes que se padecen en vacaciones. Si bien son molestias que solo duran uno o dos días, si no se tratan apenas aparezcan se pueden complicar.
Si decidides salir de viaje o de campamento durante los días feriados de Semana Santa, sin importar que el destino sea playa, campo o ciudad, es importante “armar” un botiquín viajero que contenga los productos necesarios para afrontar cualquier eventualidad; por ejemplo, medicamentos para controlar los mareos, dolores, resfriados, combatir picaduras de insectos, quemaduras, alergias, insolación, heridas, golpes, torceduras y material para curaciones como vendas elásticas, esparadrapo, alcohol y termómetro. Otras medicinas como los antidiarreicos (loperamida, etc.) pueden utilizarse si la diarrea no es infecciosa y no reviste gravedad. Si se tiene tendencia a sufrir del estómago, acidez y ardor cuando consume alimentos y bebidas abundantes, el botiquín debe incluir antiácidos u otros protectores gástricos recomendados por el médico o farmacéutico.
Si se padece alguna enfermedad…
Se recomienda que las personas que sufren de alguna enfermedad lleven consigo una cantidad de medicamentos superior a la que necesitarían para los días programados de viaje, y que los guarden en dos lugares diferentes, para evitar las complicaciones que generaría la interrupción de su tratamiento en caso de pérdida. Para preparar el botiquín de viaje hay que revisar con atención la caducidad de todos los medicamentos que se piensan incorporar, ello evitará posibles contratiempos.
