Por favor, ¡ya no pregunten más! Tras darle de nuevo la categórica respuesta, de esa manera le respondí a un amigo fanático que dice ser “enfermo” con el boxeo.
¿A qué pregunta me refiero? ¿Quién ha sido el mejor boxeador de la historia libra por libra? “
“Sugar Ray Robinson ha sido el mejor boxeador del mundo, de todos los tiempos, libra por libra…y no preguntes más”.
Aclaro que no fui grosero con el fanático. Reaccioné de esa forma porque a cada momento me hacen la misma pregunta y mi respuesta es la misma.
En mi libro “Ranking mundial de boxeo” (Los 30 más grandes de la historia) lo preciso sin ambages: Sugar Ray Robinson ha sido el mejor boxeador de la historia libra por libra…o kilo por kilo.
Walker Smith -su nombre original-, dominó los pesos welter y mediano. Cada vez que subía al ring era un espectáculo.
Dato singular: Robinson, como peleador del pugilismo aficionado, realizó 85 peleas y nunca perdió.
De esas 85 victorias 69 las terminó por nocaut. De esos 69 éxitos por la vía del sueño, 40 terminaron en el primer round. Ningún otro púgil olímpico ha realizado una hazaña de esa magnitud.
Brilló en las décadas de los 40 y 50…pero fue en los cincuenta cuando impuso su fino boxeo al extremo. En 1951 tenía registro de 128 triunfos con una sola derrota que le asestó su viejo rival, Jake LaMotta. Con Lamotta protagonizó seis sangrientas peleas -en los pesos medianos- de las cuales sólo perdió una.
El combate más sensacional, entre Lamotta y Robinson, fue celebrado el 14 de febrero de 1951. Fue bautizado como “La Batalla de San Valentín”. Del resultado de aquella legendaria batalla, que concitó la atención del mundo deportivo, hay una interesante anécdota -que también asiento en mi libro- salida de los labios de Lamotta, quien dijo esta frase: “Cada vez que peleo con Robinson, me da diabetes”.
No se confundan
Que nadie se confunda. Sugar Ray Robinson ha sido el mejor peleador de la historia libra por libra y Muhammad Ali, en mi opinión, el mejor peso completo.