El diálogo político se materializó ayer, pero sólo reunió a dos: el PLD y el PRM. La Fuerza del Pueblo se excluyó bajo el argumento de su líder de que el marco es ilegítimo, el Consejo Económico y Social (CES), dependencia del Poder Ejecutivo, pero los auspiciadores no le hicieron caso. Pedro Brache del Conep le dijo a Leonel Fernández que le mantenía reservada una silla, y que el diálogo se podía celebrar en cualquier lugar. Agripino Núñez igual le dijo que podía celebrarse “hasta en un patio”. Ambos obviaron referirse al señalamiento medular: la naturaleza del órgano que lo patrocina, el CES. Las conversaciones continúan entre dos, pero otros actores siguen su camino, muy al margen.

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