Después de las fallidas votaciones del 16 de febrero, y las tensiones originadas, incluidas las manifestaciones de jóvenes y los cacerolazos, el proselitismo se enfrió (excepto el candidato del PLD Gonzalo Castillo) y sólo este fin de semana se movieron Luis Abinader y Castillo, con recorridos por algunas ciudades. El período estuvo marcado por las protestas y posteriormente los diálogos. Se habla de viraje y de reafirmación de fidelidades. La cuestión es que el domingo serán las votaciones y la esperanza es que la gente, si bien no está en calor, al menos se afirme en los valores ciudadanos y concurra a las mesas como se desea: masivamente.