El presidente de la Asociación Dominicana de Procesadores Lácteos y Derivados (ADOPROLAD), Darío Oleaga, planteó este lunes que las «masivas importaciones de productos lácteos no sólo afectan a los productores de leche, los cuales han mostrado su preocupación en innumerables ocasiones, sino también que esa práctica desestabiliza a toda la industria láctea del país».
A través de una nota de prensa, la entidad alertó sobre la invasión de quesos europeos subsidiados de los tipos mozzarella, cheddar, entre otros.
Oleaga dijo que los quesos europeos se están vendiendo en el país al consumidor final a menos de 120 pesos la libra, “lo que representa menos del costo de producirlo en sus países de origen, y ni hablar de los nuestros, lo que significa una competencia desleal, que sólo es explicada gracias a la existencia de groseros subsidios en estos países”.
Afirmó que están en juego más de 30 mil empleos directos, que podrían desaparecer, y que afectaría no sólo a la economía de sus familias, sino también a toda la economía ganadera, y especialmente a la maltrecha economía rural.
Sobre el particular, la Asociación Dominicana de Productores de Leche (APROLECHE), que aglutina a más de 58 mil pequeños y medianos ganaderos, que también dice que están afectados por la situación, hizo un llamado a los embajadores de la Unión Europea y Estados Unidos, para que intervengan a los fines de regularizar la situación de importación de quesos subsidiados, los cuales están quebrando la producción y a la industria nacional.
Eric Rivero, presidente de APROLECHE, explicó que la importación de productos lácteos subsidiados, sin que se cumplan las normas del etiquetado, representa una grave amenaza para la industria local, y condenó que algunas empresas nacionales se estén dedicando a la tarea de importar productos terminados, en vez de producirlos aquí, perjudicando a consumidores y productores.
“Los productores también se quejan de la falta de respuesta del Estado para enfrentar esta situación, alegando que el Conaleche posee todas las herramientas para regular el mercado. Sin embargo, no es convocado por el ministro de Agricultura, quien lo preside”, se quejó Rivero.
Agregó que entre los productores está el clamor de que la situación de la ganadería y la industria láctea en general es la peor en toda su historia, debido a la pérdida del mercado y la falta de interés en el producto.
