Tucson, EE.UU.- Miembros del grupo antiinmigrante AZ Patriots dejarán de acosar a las iglesias que ofrecen albergue a familias inmigrantes en Arizona (EE.UU.) como parte de un acuerdo legal ratificado por un juez federal, informaron este lunes medios locales.
El juez federal John Tuchi, con sede en Phoenix, aprobó el viernes un acuerdo mediante el cual cuatro miembros del grupo se comprometen a permanecer alejados de varias iglesias en esta ciudad y no bloquear su acceso.
Los miembros de AZ Patriots se comprometieron también a no tomar fotografías, grabar videos o utilizar altavoces a menos 50 pies de distancia de las iglesias.
Documentos judiciales difundidos hoy revelan además que los cuatro integrantes borrarán mensajes alusivos publicados en redes sociales, y dejaran de hacer insinuaciones de que las iglesias de alguna forma están envueltas o apoyando el tráfico humano por albergar indocumentados o fugitivos.
El pasado mes de junio varios pastores de iglesias en Phoenix, representados por el Southern Poverty Law Center (SPLC, por su siglas en inglés), presentaron una demanda en contra de miembros de AZ Patriots y Patrios Movement AZ por amenazar, acosar e intimidar a las iglesias y a sus miembros.
Debido al incremento en el flujo migratorio, varias iglesias en Phoenix abrieron sus puertas dando albergue a familias inmigrantes, en su mayoría de países centroamericanos que están son liberadas por la Patrulla Fronteriza después de ser procesadas y presentar sus casos de solicitud de asilo.
Los cuatro acusados fundadores de Arizona Patriots que forman parte del acuerdo fueron identificados como Jeremy Bronaugh, Jennifer Harrison, Eduardo Jaime y Michael Pavlock.
Cuando la demanda fue presentada el pastor Ángel Campos, de la iglesia Monte Vista, dijo a los medios locales que varias veces miembros de su iglesia habían sido intimidados por estos grupos que se presentaban de manera continua a filmarlos o a agredirlos verbalmente.
El acuerdo legal no involucra a los miembros del grupo Patriot Movement Arizona, por lo que el caso en su contra continúa.
Albergues en otras ciudades como Tucson también han reportado haber tenido problemas con grupos que protestan por la ayuda que brindan a los migrantes, y que toman fotografías y video sin autorización de los voluntarios. EFE
