Washington, DC. Estados Unidos superó ayer las 150,000 muertes a causa de la COVID-19, cuando los contagios siguen aumentando en el oeste y sur del país, y ya suma 4.39 millones de casos confirmados.
El recuento independiente de la Universidad Johns Hopkins cifró en 150,034 los fallecimientos debido a la pandemia, lo que supone un 22.6 % del total de muertes en el mundo, que este miércoles sumaban 662.297.
Los contagios en EEUU representan un 26 % de las estadísticas globales.
California, que de ser un país sería la quinta economía mundial y cuenta con una población cercana a los 40 millones habitantes, está al frente de las cifras nacionales, con 473,785 casos.
Le siguen Florida, con 451,413 positivos, y Nueva York (413,593), que fue a comienzos de la pandemia el estado más afectado en enfermos y fallecidos
En California, la situación ha empeorado ya que se han registrado varios récords en número de casos y muertes. Este miércoles, las cifras oficiales daban cuenta de 8,716 fallecidos.