Las bandas armadas siguen en las calles, y la inseguridad y la violencia no cesan en Haití. Los días van pasando y la escasez de los productos y materias primas debido a bloqueos por esa situación mantiene en crispación a un pueblo, que desde del asesinato su presidente Jovenel Moise, deambula en medio de la crisis social y política más dura en la historia reciente de esa nación.
Preocupada por toda esa situación y compelida por el llamado de urgencia de varios países de la región frente a esa realidad, la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) abordará la próxima semana el tema y la crisis por la que atraviesa el vecino país.
Así lo informó ayer la representante permanente en República Dominicana de la OEA, Araceli Azuara, quien adelantó que la asamblea se efectuará los días 10 y 12 de este mes con la presencia de los cancilleres de los países de América.
“La próxima semana se llevará a cabo los días 10 y 12 la asamblea general de la OEA (…) en presencia de todos los cancilleres de Las Américas. Temas de vital importancia para todo el continente estarán presentes y, entre ellos estará, sin lugar a dudas, la situación por la que está atravesando el hermano país de Haití. La asamblea general será virtual, y ya están abiertos los espacios para poder participar, pero si bien la sede es Guatemala, dadas las condiciones de pandemia, tendrá esta modalidad que es un poco híbrida, pero que en realidad será más virtual que presencial”, dijo Azuara en declaraciones a la prensa tras la apertura de la VII Conferencia Interamericana de Catastro y Registro de la Propiedad, celebrada en el hotel El Embajador de esta capital.
El pasado lunes, el presidente Luis Abinader emplazó, una vez más a la comunidad internacional para que de manera urgente atienda la crisis en Haití y, de manera directa, solicitó la atención de los líderes de Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Canadá.
Hasta tanto se logre una salida a la descomposición social y política en Haití por la inseguridad que impera su territorio por el dominio, Abinader anunció que la República Dominicana establecerá medidas migratorias más estrictas en la frontera domínico-haitiana.
Autoridades de RD y Haití rozan
Tras las declaraciones de Luis Abinader, el Gobierno de Haití respondió, en voz de su canciller Claude Joseph y dijo que en la República Dominicana también había inseguridad y delincuencia.
No conforme con esa respuesta, el ministro de Interior y Policía de la República Dominicana, Jesús Vásquez Martínez, calificó de imprudentes y desacertadas sus declaraciones, por considerar que no se ajustan a la realidad dominicana.
“Las declaraciones del canciller haitiano, Claude Joseph, son imprudentes y desacertadas porque la realidad dominicana es muy diferente a la del vecino país. Además, el gobierno dominicano ha sido el más solidario a la hora de colaborar con la crisis haitiana. @Haitienesp #Haiti”, publicó el ministro de Interior en su cuenta de Twitter.
Por otro lado, el cónsul general dominicano en Juana Méndez, Haití, José Valenzuela, tildó como “poco diplomática” la respuesta del canciller haitiano.
El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) también respaldó al presidente Abinader, en su postura de defensa de la soberanía y del territorio nacional ante la amenaza que representa Haití por la grave crisis política, social y económica que atraviesa esa nación.
Así lo informó el presidente del PRSC, Federico Antún Batlle (Quique), quien sostuvo que el llamado hecho ayer por el presidente Abinader a la comunidad internacional.
“Debe ser respaldado por toda la clase política del país, los empresarios y todo el pueblo dominicano”, dijo el dirigente político al externar su preocupación por la problemática.
¿Cómo ha estado la situación en Haití?
Haití atraviesa una fuerte inestabilidad desde el asesinato del presidente Jovenel Moise, el pasado 7 de julio, una crisis que se ha visto agravada en las últimas semanas por la inseguridad causada por las bandas armadas. Las pandillas han causado desabastecimiento de combustible en el país y están causando el pánico de la población, en especial en la zona metropolitana de Puerto Príncipe, con robos, asesinatos y secuestros indiscriminados.
Para cuidar el territorio nacional, la República Dominicana ha desplegado 12,000 militares en la frontera, debido a la crisis en el país vecino. Además de custodiar la frontera, los militares están controlando la venta de combustible, para evitar el tráfico ilegal.
