Pepe Mujica Doctor Honoris Causa UASD fue la frase que marcó un momento inolvidable para la historia académica y política de República Dominicana. El 15 de febrero de 2016, la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) otorgó su más alto reconocimiento al expresidente de Uruguay, José Alberto Mujica Cordano, destacando sus aportes extraordinarios a la democracia, al respeto por los derechos humanos y su ejemplo de vida pública íntegra y austera.
El emotivo acto se llevó a cabo en el Aula Magna de la UASD, donde cientos de estudiantes, autoridades y gremios universitarios ovacionaron al popular líder uruguayo, conocido en toda América Latina por su sencillez, honestidad y firme defensa de la justicia social.
Durante la ceremonia, el rector de la UASD en ese entonces, Iván Grullón Fernández, junto al decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas, Antonio Medina, hicieron entrega formal del título Doctor Honoris Causa a Pepe Mujica. También le colocaron la esclavina distintiva de la facultad, la sortija y el escudo de la universidad, símbolos de la distinción que recibió con humildad.
Grullón Fernández destacó que Mujica “es un estadista con profunda vocación humanista, que vivió la política como una herramienta para transformar vidas, y no para enriquecer su bolsillo”.
Recordó que su paso por cargos como diputado, senador, ministro y presidente de Uruguay fue siempre coherente con los valores de honestidad, solidaridad y dignidad.
Un discurso que tocó corazones
Visiblemente emocionado, Mujica agradeció el reconocimiento, pero aclaró que lo aceptaba en nombre de todos aquellos que han luchado por un continente más justo y humano.
“Soy un sobreviviente, vivo de casualidad. Este homenaje es para quienes ya no están, pero dejaron su vida peleando por la igualdad”, afirmó.
Durante su intervención, abogó por una América Latina con mayor equidad, oportunidades reales y justicia social. Criticó la idea de desarrollo basada en el sacrificio de la felicidad humana y llamó a los jóvenes a luchar por un mundo donde el afecto y la libertad sean pilares esenciales.
“No hay felicidad sin afectos. Y no hay libertad si no hay libertad en la inteligencia”, expresó ante un público que no dejaba de corear: “¡Pepe querido, la UASD está contigo!”
Una vida de coherencia y lucha por la dignidad
José “Pepe” Mujica fue presidente de Uruguay entre 2010 y 2015. Antes de eso fue guerrillero, preso político, legislador y ministro. Su presidencia se caracterizó por el enfoque ético y austero con el que manejó el poder.
Vivía en una modesta casa de campo, conducía un Volkswagen Escarabajo y donaba buena parte de su salario a causas sociales.
Su manera de ejercer la política con honestidad y su cercanía con los más humildes lo convirtieron en uno de los líderes más respetados del continente. Para muchos, Pepe Mujica simboliza que es posible gobernar sin privilegios, sin corrupción y con verdadera vocación de servicio.
Un legado que trasciende generaciones
El fallecimiento de Mujica el 13 de mayo de 2025, tras una lucha contra el cáncer de esófago, ha generado múltiples homenajes en toda América Latina. Su vida y sus ideas siguen inspirando a estudiantes, líderes y ciudadanos que sueñan con un mundo más justo.
El reconocimiento de Pepe Mujica como Doctor Honoris Causa por la UASD es una de las muchas huellas que dejó en el camino de su incansable lucha por la dignidad humana. Aquel día de 2016, la universidad pública dominicana selló su admiración por un hombre que convirtió su vida en un ejemplo de coherencia y compromiso.