San Juan. El coronel José Juan García, responsable de la Comandancia del área de San Juan de la Policía de Puerto Rico, justificó el lanzamiento de gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que pedían la dimisión de la gobernadora por presuntas agresiones previas contra los agentes.
García aclaró en conferencia de prensa que el uso de gases lacrimógenos la noche del jueves estuvo justificado debido a la agresividad de los manifestantes.
“Lanzaron aceite de vehículos a los agentes de la Policía”, aclaró el oficial sobre los incidentes del jueves, cuando las fuerzas del orden recurrieron a los gases lacrimógenos para dispersar a las personas.
Estos se manifestaban en San Juan para pedir la dimisión de la gobernadora por la atención a los damnificados de los terremotos, tras conocerse que no se repartieron víveres disponibles en las áreas afectadas.
“Antes de lanzarse los gases hubo catorce advertencias a los manifestantes”, dijo García sobre los graves incidentes registrados en el casco histórico del Viejo San Juan de la capital puertorriqueña que se saldaron con mobiliario urbano destrozado.
El jefe policial añadió que los manifestantes, tras ser advertidos, respondieron con el lanzamiento de piedras y de también gases, lo que hizo inevitable la intervención de las fuerzas del orden.
García sostuvo que los manifestantes destruyeron mobiliario urbano y agredieron además a algunas personas, entre ellos periodistas que cubrían los incidentes.
Dijo que se siguieron todos los protocolos establecidos en estos casos, pero que fue inevitable intervenir una vez que los manifestantes recurrieron a la agresión.
Tras pedir el fin de la concentración sin éxito, sobre las 21.00 hora local del jueves (1.00 GMT del viernes) se activó la Unidad de Operaciones Tácticas (UOT) y la Unidad Motorizada de la Policía de Puerto Rico.
