Bruselas. El destituido presidente del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, insistió en una conferencia de prensa el martes que no tiene planes de pedir asilo en Bélgica y que regresaría a España una vez que las condiciones se lo permitieran.
Mientras, una encuesta de opinión publicada por el centro oficial de opinión de Cataluña, indicó que el sentimiento a favor de la independencia de la región ha aumentado en el último mes.
De acuerdo con la encuesta, 48,7% de los catalanes están a favor de independizarse de España, lo que representa un aumento en comparación con el 41,1% que apoyaba el movimiento en junio. El 43,6% de los catalanes está en contra de la independencia.
La encuesta entrevistó a 1.500 personas y tiene un margen de error de 2,69%.
Ayer, el líder del partido gobernante flamenco, la Nueva Alianza Flamenca (N-VA), dijo que no dará la espalda al expresidente del Gobierno catalán, Carles Puigdemont, incluso si el gobierno se rehúsa a tratar con el líder independentista.
Bart De Wever indicó que “no voy a abandonar a nuestros amigos. Nunca daré la espalda a mis amigos, no cuando están en problemas”. El N-VA ha tenido buenas relaciones con los separatistas catalanes, pero como parte del gobierno debe hacerlo discretamente. Por su parte, el Gobierno belga dijo que se mantendría en contacto con las autoridades españolas sobre la estancia de Puigdemont en su territorio. Y el primer ministro belga, Charles Michel, dijo el martes que a Puigdemont no le otorgarán favores especiales.
Ayer, una jueza convocó al destituido gabinete catalán a comparecer esta semana en Madrid como parte de una investigación por rebelión por seguir con la declaración de independencia.
El principal grupo civil secesionista de Cataluña aprueba la comparecencia del destituido líder regional en Bruselas, junto con otros miembros de su antiguo gobierno, ya que cree que es positivo porque atraerá la atención internacional hacia la situación en Cataluña y su deseo de independencia.
