Washington. Una vez más, Estados Unidos se levantó impactado por un tiroteo, en este caso en Indianápolis (Indiana), donde ocho personas murieron y cinco resultaron heridas después de que un hombre armado abriera fuego antes de quitarse la vida, en un suceso sobre el que todavía se desconocen las motivaciones.
Alrededor de las 23.00 hora local del jueves, el atacante comenzó a disparar a quemarropa en un almacén de la empresa de servicios postales FedEx, situado cerca del aeropuerto de Indianápolis. A su llegada al lugar, la policía encontró a cuatro de los fallecidos fuera del centro y a otros cuatro en su interior.
“Cuando los agentes llegaron se encontraron con una escena del crimen caótica y activa, hallaron varias víctimas -heridos y varias víctimas fallecidas-, así como al sospechoso muerto aparentemente por una herida de arma que se autoinfligió”, dijo el subdirector de Investigaciones de la Policía de Indianápolis, Craig McCartt, en una rueda de prensa ayer viernes.
El autor del tiroteo era un exempleado, de 19 años, identificado como Brandon Hole.
A través de las entrevistas con testigos, las autoridades han averiguado que el sospechoso llegó al lugar en un vehículo y que empezó a disparar indiscriminadamente en el aparcamiento del almacén para más tarde entrar en el local antes de quitarse la vida. “No tuvo ninguna confrontación con nadie, ninguna discusión, simplemente comenzó a disparar indiscriminadamente”, afirmó McCartt.
Investigaciones
Por el momento, las autoridades consideran que es demasiado “prematuro” para hablar de las motivaciones del sospechoso, que todavía no ha sido identificado formalmente, aunque la policía tiene “una idea” de quién es. De la misma forma, la oficina del forense todavía no ha logrado identificar a las víctimas mortales del tiroteo.
El sospechoso empleó un rifle
La Policía no ofreció detalles sobre el tipo de arma empleada y McCartt se limitó a indicar durante la rueda de prensa que el sospechoso utilizó un rifle. Este incidente ha vuelto a abrir por enésima vez el debate sobre un mayor control de las armas de fuego en EE.UU. y este viernes muchos demócratas alzaron su voz para instar al Senado a que apruebe una nueva legislación.
