Luego de la enfermedad de su madre, la emprendedora dama decidió incursionar en esa empresa junto a sus hijas
Perder a un ser querido, en especial una pareja, puede sumergir a cualquier ser humano en un abismo, pero para Tania Matos Pérez, el fallecimiento de su esposo, la enfermedad de su madre y quedarse sola con sus dos niñas menores, fue el impulso necesario para empezar un negocio que poco a poco ha ido cruzando fronteras.
Tania se define como una mujer emprendedora, que gracias a la fidelidad de Dios, se levanta todos los días a buscar el sustento de su familia. Afirma que no puede atribuirse el mérito de todas las cosas que ha logrado, porque de no haber sido por su fe, “mínimo tuviera en el manicomio”.
Fue una niña divertida, estudiosa y muy sociable que creció en un hogar de padres separados, pero siempre rodeada del amor de sus abuelos y primos. Dice que su abuela fue una mujer con mucha sabiduría y fortaleza y es una de las personas que más enseñanzas le ha dejado.
Dice que aunque no vivió con su padre, nunca le guardó rencor sino que lo veía como un superhéroe.
Maestra sustituta, estilista a domicilio, vendedora por catálogo y distribuidora de pizzas, fueron algunas de las actividades en las que se involucró esta luchadora mujer, hasta crear su proyecto TM Events, que trajo como efecto secundario a “Los Morenitos”, unos postres artesanales que cautivan el paladar de todo aquel que tiene la oportunidad de probarlos.
Este producto está hecho a base de crema de chocolate y brownies, que en combinación con otros ingredientes, crean una mezcla de sabor inigualable, no contiene colorantes, ni conservantes artificiales y es vendido a sus clientes totalmente fresco. El tiempo de preparación es de tres horas y media.
“No nos gusta prepararlos para tenerlos ahí afuera, es algo que lo vendemos fresco. Si un cliente lo compra y lo tenemos en la nevera, inmediatamente ya no está recibiendo algo del momento, aunque somos testigos de que luego que se adquiere el postre, puede durar meses en la nevera y su sabor no cambia. La gente está loca con estos dulces y nosotros nos hemos propuesto mantener la calidad”, explica. A Tania se le puede contactar vía @morenitos_ y por Whatsapp al teléfono 809-952-3323.
Sinergia familiar
La emprendedora trabaja en combinación con sus dos hijas, Madeline Carolina y Marielys Daniela y con ellas surgió la idea de colocarle a este producto un nombre tan peculiar.
“Cuando nos lanzamos, aún no teníamos un nombre definido, sólo lo llamábamos brownies. Un día nos sentamos las tres y comenzamos a pensar en posibles opciones, ninguna terminaba de gustarnos, hasta que de repente, Madelyn dijo ‘Morenitos’, y eso fue amor a primera vista”, comenta Tania entre risas.
Los Morenitos, dependiendo de la época del año pueden variar su nombre, convirtiéndose en ‘Los Borrachitos’, pero siempre manteniendo su esencia; son tratados como los niños pequeños de la familia Matos y esta presentación tan jocosa, es lo que ha provocado que estos brownies con crema de chocolate, empiecen a exportarse a Estados Unidos, países de Europa y próximamente a Canadá. Explica que el ‘toque mágico’ que hace única sus preparaciones, es el amor que ponen en cada uno de sus encargos. Además, dice que han optado por utilizar cucharas de madera para darle a la presentación un toque rústico y al mismo tiempo ayudar al medio ambiente, promoviendo la reducción del plástico.
Tania dice que está sorprendida de la aceptación que han tenido estos dulces por parte del público, ya que su única publicidad ha sido el ‘boca a boca’, y las recomendaciones de la gente.
“Estamos realmente sorprendidas porque no hemos hecho ningún tipo de publicidad, ni formal ni profesional y hemos alcanzado buenos resultados”, expresa Tania. Además, me siento súper feliz, especialmente porque es un proyecto que llevo con mis hijas, que son lo más importante para mí”, agrega. Gracias a esta idea innovadora, en unos cuatro meses, los ingresos de esta familia han mejorado en un 80%. La emprendedora mujer asegura que dentro de lo difícil, ‘Los Morenitos’, ha sido una bendición.