I
Empecé a leer la Novela “Unidos en la Lucha”, porque su autor, mi amigo sindicalista, José Gómez Cerda, me invitó a escribir el Prólogo, cosa que acepté con mucho gusto, sintiéndome muy honrado. Me iba a tomar el tiempo que fuera necesario para ello. Pero desde el comienzo me cautivó tanto que me la leí de “un tirón”. Pasé de prologuista a lector entusiasmado. Tal vez a usted le pase lo mismo, sin la obligación de tener que escribir una presentación como yo.
II
He aquí dos definiciones de novela que están en el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia:
1. “Obra literaria en prosa en la que se narra una acción fingida en todo o en parte, y cuyo fin es causar placer estético a los lectores con la descripción o pintura de lances interesantes, de caracteres, de pasiones y de costumbres”.
2. “Hechos interesantes de la vida real que parecen ficción”.
Una característica, pues, indiscutible en la novela es la de que ha de ser interesante: o bien se narra “una acción fingida interesante” o “hechos de la vida real que parecen ficción y han de ser interesantes también”.
En la presente novela usted encontrará, sin lugar a dudas, una narración, una acción, que es interesante y cautiva la atención, pero también hechos de la vida real de los obreros y del sindicalismo, que parecen ficción.
En ella se confunden la ficción, que sale de la realidad, y la realidad misma que parece ficción.
III
Como en toda novela hay en esta una trama, una lucha que termina en un desenlace, feliz o infeliz, que no se conoce sino al final. También hay protagonistas.
En ésta, los dos protagonistas más visibles de la acción, no son individuos como suele acontecer, sino grupos:
Los obreros y los patronos, siendo, en verdad, el protagonista principal de la misma la unidad de los obreros en el sindicato. De ahí el título: “Unidos en la lucha”.
También hay un elenco o reparto de protagonistas individuales, hombres o mujeres, muchos de ellos conocidos e históricos, cuya vida real en el mundo obrero, empresarial y sindical, parecen de ficción, de novela, a saber:
– Pedro Peralta Hijo
– José Joaquín
– Mary Jeréz
– Orlando Inoa
– Padre Manuel González Quevedo, S. J.
– Flavia Salazar
– Rosendo López
– Celso Marranzini
– Dra. Sonia Marmolejos
– Don Pedro Gutiérrez
– Juanita Pichardo
– Cecilia Cerda
– Alicia Guerra
– Katiuska Brito
– Luciano Robles
– Eliseo Candelario
– Vicente Díaz
– Gabriel del Río
– Henry Molina
– Emilio Máspero
– Dr. Augusto Gómez Sosa
A muchos de ellos los conocí personalmente y los traté. Ahora los conozco en su hondura, porque en sus vidas reales fueron actores de una novela y protagonistas de la misma.
IV
Cabe destacar en la lucha obrera, en sus huelgas, en sus triunfos y logros históricos, y en esta novela, por tanto, el rol clave que jugaron:
– Las mujeres (madres, esposas y
hermanas).
– Los sacerdotes de la Iglesia en el
marco de la Doctrina Social Católica.
– La prensa, con el poder de sus informaciones a tiempo, despejando manipulaciones.
– El método de lucha no-violenta, con armas pacíficas, como las huelgas, el diálogo, la puesta en práctica de los valores, tales, la justicia, la solidaridad, la unidad, el estar dispuesto a sacrificarse y dar la vida por los demás, como lo hicieron Mahatma Ghandi, Martin Luther King, Nelson Mandela, siguiendo el ejemplo de su Maestro y Mentor, Jesucristo.
V
Dejo, pues, en sus manos esta interesante novela, en la que se integran de tal manera la ficción y la realidad, que usted no llega a saber dónde la trama es ficción o dónde la realidad sindical y obrera se torna en verdad, una novela, donde los hechos reales parecen ficción.
VI. Presentación
Para completar la visión de mi Prólogo, he aquí la presentación del Autor:
“Esta obra parece una novela, pero es una realidad…
¿Una novela en el género de realismo crítico, sobre el movimiento de los trabajadores, escrita por un sindicalista?
¿Un libro digital, una novela con audiovisuales y las redes sociales?
¡Estas son novedades en la literatura!
Me siento muy complacido que Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio haya aceptado escribir el prólogo.
Estoy agradecido de él, que me llevó como profesor laico al Seminario Pontificio Santo Tomás de Aquino, cuando él era el Rector, Benito de los Ángeles y Freddy Bretón eran vice-rectores.
Esa novela está escrita en el género del realismo crítico, para analizar críticamente la realidad de la sociedad dominicana, ahora y aquí, detectar las raíces de problemas actuales.
Es indudable que tanto el tema como la procedencia del narrador no sea lo que ocurre actualmente dentro de la literatura moderna, cuando se buscan temas sofisticados, palabras exóticas y estilos indescifrables para la mayoría del pueblo.
En nuestro país, como todo el continente latinoamericano, muy pocas personas se dedican a escribir sobre y para la clase trabajadora, este tema ha sido muy pocas veces abordado.
La condición de escritor dentro de la clase trabajadora, en especial del sindicalismo, es muy difícil, las actividades diarias, las múltiples acciones, son tareas que no dan margen a dedicar el tiempo necesario para realizar una labor tan personal, de concentración como es la narrativa.
Nosotros los trabajadores, no tenemos muchas posibilidades de leer, menos para escribir, sin embargo, con un poco de esfuerzos podemos ir trillando el camino de la literatura, que es fascinante.
El sindicalismo es una Escuela de Vida donde se aprende el valor de los hombres, sus sufrimientos y esperanzas. Los que somos autodidactas no estamos sujetos a ninguna tendencia literaria, sino al compromiso con la clase trabajadora.
La formación intelectual normalmente se hace por medio de los estudios, en el caso de los trabajadores se hace por medio de la acción.
“¡Unidos en la Lucha!” es una novela escrita por un trabajador; es posible que inicie el tema del movimiento de los trabajadores. ¡El sindicalismo dentro de la literatura nacional!
Esta obra también tiene un carácter internacional. Hoy día los libros digitales no se limitan a lo nacional, pueden llegar fácil y rápidamente a niveles universales.
“¡Unidos en la Lucha!” nos presenta una novela con personajes nacidos de la realidad, en un ambiente donde la clase trabajadora vive sometida a una sociedad de consumo, sufre la opresión y represión del sistema actual.
Varios de los personajes son realidades en el movimiento de los trabajadores, la trama también es un reflejo de la marcha de un sindicalismo honesto, serio y comprometido.
Está escrito para un público especial: los trabajadores del campo y la ciudad. Ese público es para nosotros el crítico que más respetaremos su opinión… es un libro para militantes. Un pequeño y humilde aporte de la clase trabajadora para ir buscando nuestra propia expresión.
El objetivo es claro y definido: Servir como instrumento de superación para que dentro de nuestra propia clase trabajadora puedan existir precedentes que estimulen a todos aquellos jóvenes trabajadores a que puedan aportar sus ideas, criterios, acciones y escritos, todo lo que esté a su alcance para fortalecer el movimiento de los trabajadores.
Esta obra planea sencillamente cómo se forma un sindicato de trabajadores, cómo se organiza una liga agraria, la unidad que debe existir entre los trabajadores urbanos y campesinos”.
VII. Conclusión
DOY FE en Santiago de los Caballeros a los veintisiete (27) días del mes de abril del año del Señor dos mil diecisiete (2017).
