Con las puertas de la casa donde vivía Donaly Joel Martínez cerradas, sus familiares le dan el último adiós, luego de que resultara muerto a manos por un policía en el carnaval de Santiago la tarde del pasado domingo.
Gritos, lágrimas, personas en estado de ‘shock’ y otras casi desmayadas es el ambiente en el lugar donde velan a Donaly, en el sector Cienfuegos, de Santiago Oeste.
En el lugar fue colocada una lona que cubre la calle hasta la acera. Esto, como forma de extender el espacio donde los amigos y allegados a la familia se encuentran acompañando a los parientes en esta dolorosa situación.
Niños en el rango de edad de Donaly, sus amigos “que siempre salían a jugar en las noches con él”, también se encuentran presentes. Tristes en medio de los gritos desconsolados que se alcanzan a escuchar en toda la calle.
A uno de los compañeros de su escuela se le escucha decir «¿Y con quien yo voy a jugar ahora?»
Donaly, hijo de Anthony Martínez, era el hermano mayor de una bebé de apenas un año de nacida.
El adolescente de 11 años se preparaba para ir a las olimpiadas de matemáticas de este año. También esperaba reconocimiento como estudiante meritorio por tercera vez cuando culminara su 6to grado en la Escuela Ciriaco Sancha.
