La Procuraduría General de la República (PGR) inició ayer la demolición de la cárcel preventiva de San Luis, en Santo Domingo Este, la que se encontraba en estado de hacinamiento, para su posterior reconstrucción.
Según explicó el ingeniero a cargo de la obra, Cesarión Morel, el costo será de 97 millones de pesos y se tiene previsto construir en el mismo terreno dos edificios, uno de cuatro pisos para celdas y otro de tres para oficinas administrativas.
Morel explicó que posiblemente dentro de nueve meses el centro estará listo.
Tenía sobrepoblación de 150 reos
La cárcel preventiva de San Luis, que funcionaba en una pequeña capilla, tenía capacidad para tan solo 25 personas, sin embargo tiene una sobrepoblación de más de 150 personas, debido a que desde el 2012, diariamente albergaba un promedio de 180 imputados de ambos sexos, quienes debían permanecen allí hasta tanto se les conocen medidas de coerción en el Palacio de Justicia de la Charles de Gaulle.
El levantamiento de la nueva edificación es parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario Nacional, que tiene como uno de sus objetivos, la construcción de nuevas edificaciones que permitan alojar a los más 12 mil internos, que guardan prisión de manera deplorable.
La cárcel contaba con dos celdas, dos baños sucios y llenos de heces fecales y orina, sin camas, ni colchones, sin circuito cerrado de seguridad ni cámaras de vigilancia, con poca ventilación.
En octubre pasado, el procurador general de la República, Jean Alain Rodríguez, indicó que se construirá un nuevo reciento, que tendrá capacidad para 236 personas y cumplirá “con todas las normas internacionales de derechos humanos y de tratamiento a reclusos de la ONU”.
Nueva cárcel tendrá celdas especiales
Jean Alain Rodríguez dijo que este será el primer centro preventivo que incluye celdas especiales para internos convalecientes o con alguna discapacidad, las cuales estarían ubicadas próximas al punto de atención médica que también está contemplado dentro del recinto. El próximo miércoles 16 se dará el primer picazo para la construcción de la nueva edificación.
