Compañeros de estudios del asesinado Yuniol Ramírez Ferreras realizaron un encendido de velas en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), como muestra de solidaridad con los familiares y para exigir justicia.
Los abogados de la promoción de Ramírez Ferreras se reunieron en la embajada de los estudiantes de Derecho, ubicada en el campus universitario, desde donde se trasladaron hasta el parqueo del edificio Nueva Unidad, lugar desde donde fue Ramírez Ferreras raptado por José Antonio Mercado Blanco (El Grande) y Argenis Contreras González, quienes de acuerdo a las autoridades posteriormente lo mataron.
Hablando en nombre del grupo promoción de Ramírez Ferreras, el abogado Euren Cuevas Medina expresó que el motivo de este encendido de velas de parte de los compañeros de Yuniol Ramírez Ferreras, es para llamar la atención y solidarizarse con el dolor de la familia.
“Lo que pedimos, entonces, es que las investigaciones como ya van encaminadas lleguen hasta las últimas consecuencias y que caigan todos los responsables, los autores materiales y los autores intelectuales”, manifestó Cuevas Medina.
Que paguen los culpables
Los compañeros de estudios del malogrado abogado y profesor universitario llamaron la atención de las autoridades exigiendo que trabajen en el cese de la violencia y que la política anticrimen del Estado se ponga en ejecución.
“No es posible que siga la violencia en el pueblo dominicano como le pasó a nuestro compañero Yuniol. Este reclamo pacífico a través de estas velas encendidas es para que se tomen medidas preventivas de lugar y que no ocurran hechos como este en el que nuestro compañero Yuniol perdió la vida”, agregó Cuevas Medina.
Deploró que desde hace tiempo Ramírez Ferreira hizo la denuncia de corrupción en la Oficina Metropolitana de Servicio de Autobuses (OMSA) y no se le hizo caso.
“Se dejó que eso corriera y el dejar hacer y el dejar pasar es lo que ha permitido que nuestro compañero hoy ya no esté con nosotros y recibiera una muerte tan burda, tan baja y tan horrible como no merece ningún ser humano”, sostuvo el jurista.
