El enviado del papa Francisco, monseñor Edgar Peña Parra, presidió la misa solemne por los 100 años de coronación de la Virgen de la Altagracia, momento que aprovechó para abogar por el derecho al respeto de la vida, refiriéndose al aborto.
Asimismo, Peña Parra pidió por la unidad de la familia representada en la Virgen de la Altagracia.
Sugirió a los dominicanos mantener su dignidad como hijos de Dios, al tiempo que lanzó un llamado de paz para el mundo.
Dijo que la Virgen de la Altagracia es veladora de la dignidad y es su imagen donde se ve revelada esta parte de los hijos de Dios.
Asimismo, el enviado del papa llamó a la juventud dominicana a prepararse para ocupar su espacio en la sociedad y alcanzar un desarrollo cada vez más humano y cristiano.
En uno de los palcos están la vicepresidenta de la República, Raquel Peña; la primera dama, Raquel Arbaje, los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados, Eduardo Estrella y Alfredo Pacheco.
Con la llegada de la carroza con el cuadro de la Virgen de la Altagracia se inició la culminación del jubileo altagraciano por los 100 años de coronación canónica.
La imagen recorrió el Estadio Olímpico Félix Sánchez donde miles de devotos de la Virgen fueron testigo de este hecho histórico.